El Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce) emitió un comunicado en el que advirtió sobre el crecimiento del déficit comercial en América del Norte debido a los aranceles del 25% impuestos por Estados Unidos a México y Canadá, medida que entra en vigor a partir del 4 de febrero. Según el organismo, estos gravámenes no solo afectarán a los países involucrados, sino que también debilitarán el aparato productivo regional, aumentarán los costos para los consumidores y reducirán la competitividad de las exportaciones de América del Norte en el mercado global.
EL COMCE
El Comce expresó que el uso de aranceles como herramienta para alcanzar objetivos políticos ajenos al comercio atenta directamente contra los trabajadores y consumidores de la región. Además, destacó que esta medida provoca una respuesta inevitable por parte de los países afectados, lo que podría generar un círculo vicioso de represalias económicas.
“El Comce considera que la utilización de aranceles como arma comercial para obtener objetivos ajenos a éste, atenta contra los trabajadores y consumidores de la región y obliga a los países afectados a responder. Esta orden ejecutiva debilita a las economías de México, Estados Unidos y Canadá, haciéndolas más vulnerables”, señaló el organismo en su comunicado.
RIESGOS PARA LA ECONOMÍA REGIONAL Y LOS TRABAJADORES
En su declaración, el Comce subrayó que la esencia de los tratados comerciales como el T-MEC radica en facilitar el acceso al mercado y generar certidumbre para las inversiones, lo que, a su vez, impulsa el empleo y la prosperidad regional. En este sentido, la imposición de aranceles pone en riesgo los logros alcanzados en las últimas tres décadas, que han permitido una integración económica sin precedentes entre los tres países.
El organismo también destacó que México ha cumplido con sus compromisos en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), y que el país es un socio confiable para la región, especialmente cuando se trata de cuestiones cruciales en la cadena de valor que contribuye al 30% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial.
EL COMCE SE UNE A LA DEFENSA DEL T-MEC
A pesar de las dificultades, el Comce reiteró su compromiso con las reglas del T-MEC y alentó a continuar el diálogo y la cooperación entre los tres países para resolver las diferencias comerciales. El organismo también subrayó que está trabajando de la mano con el sector empresarial de México, Estados Unidos y Canadá para encontrar soluciones que beneficien a los trabajadores y las economías regionales.
“Esta orden ejecutiva pone en riesgo la prosperidad compartida que se ha construido en las últimas tres décadas. Estamos en coordinación con el sector empresarial de los tres países para encontrar soluciones que beneficien a nuestros trabajadores. En Comce, nos sumamos al llamado de unidad y coordinación pronunciado por el Gobierno de México”, señaló el comunicado.
EL ORIGEN DE LOS ARANCELES Y SU IMPACTO
Los aranceles impuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, buscan presionar a México para que refuerce su control sobre la frontera con Estados Unidos, particularmente en lo relacionado con la migración y el narcotráfico. Sin embargo, tanto las autoridades mexicanas como los expertos en comercio han afirmado que estas tarifas afectarán gravemente a ambas naciones y podrían desestabilizar aún más las economías profundamente entrelazadas de América del Norte.
Trump había prometido imponer aranceles punitivos a las exportaciones mexicanas y canadienses desde su campaña electoral, y finalmente cumplió su amenaza el 1 de febrero, al anunciar una tasa del 25% sobre todos los productos exportados por México hacia Estados Unidos, a excepción de la energía canadiense, que tendrá un arancel del 10%. Esta medida ha generado una respuesta firme tanto del sector privado como de los gobiernos de México y Canadá, quienes advirtieron sobre las repercusiones que tendrá en la región.
LAS CONSECUENCIAS PARA LAS INDUSTRIAS MÁS AFECTADAS
Según un análisis realizado por diversas asociaciones empresariales, algunas de las industrias que sufrirán mayores daños por la aplicación de estos aranceles incluyen la automotriz, la manufacturera, la textil y la agrícola, todas fundamentales para las economías de los tres países. Además, se teme que el incremento en los costos de los productos resulte en una disminución del poder adquisitivo de los consumidores y una pérdida de competitividad en los mercados globales.
El impacto de los aranceles será monitoreado de cerca en los próximos días, y se espera que las autoridades y los sectores empresariales continúen buscando soluciones para mitigar los efectos de esta medida que, según expertos, podría alterar la dinámica comercial y económica de América del Norte por años.