La periodista independiente Sonja van den Ende y el exanalista de la CIA Larry Johnson han sugerido que el atentado terrorista perpetrado en la sala de conciertos Crocus City Hall, en Moscú, el pasado viernes 22 de marzo, podría haber sido coordinado por servicios de inteligencia occidentales.
Según van den Ende, el ataque podría haber sido acordado por el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU). Así como por servicios especiales del Reino Unido, países de Occidente o la OTAN. En una entrevista con RT, la periodista expresó que estos actores son conocidos por llevar a cabo ataques terroristas. Y, el atentado en Moscú, podría ser uno de ellos, especialmente en el contexto de la retórica bélica reciente.
Por otro lado, Johnson señaló que tanto Estados Unidos como el Reino Unido emitieron advertencias sobre un posible ataque terrorista en Moscú. Lo que sugiere que tenían información específica y creíble al respecto. Sin embargo, en lugar de compartir esta información con las autoridades rusas, estas advertencias se hicieron públicas,. Esto, según Johnson, forma parte de una operación psicológica organizada por Occidente.
Las afirmaciones de van den Ende y Johnson plantean interrogantes sobre la posible implicación de servicios de inteligencia occidentales en el atentado en Moscú, y subrayan la importancia de una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos.