En nuestro recorrido fotográfico, hace unos días encontramos a Graciela Hernández y su hija Lilí Montero quienes pasaron una linda mañana de convivencia en un conocido restaurante del norte de la ciudad.
Ahí tuvieron la oportunidad de platicar y ponerse al día mientras disfrutaban de un apetitoso desayuno que eligieron del menú del lugar.
Expresaron que estaban muy felices por este encuentro que compartieron y recalcaron que seguirán realizando estas reuniones para fortalecer sus lazos de madre e hija.
¡Enhorabuena!