Ser mujer en pleno 2024
Cada mujer es un libro abierto con una historia distinta que contar. Para bien o para mal, hemos aprendido el significado de manera distintas.
Alguna vez te habías preguntado, ¿qué significa ser mujer? En lo personal jamás me había pasado por la cabeza, pero ahora, a mis 26 años, entiendo un poco más el poder que tenemos para conquistar el mundo.
Aunque a simple vista puede parecer una misión imposible, la realidad, es que no es así. Gracias a que más mujeres están cansadas de vivir tantas injusticias, feminicidios y agresiones en el día a día, es que hemos podido desarrollar el arma más letal de todos los tiempos, que es capaz de terminar con cualquier barrera social e ideológica que se interponga en nuestra libertad: ¡la sororidad!
Y es que, a pesar de tardarnos muchos años en descubrirla, entenderla y hacerla nuestra, es lo que hoy en día nos mantiene vivas y unidas.
¿Qué significa ser mujer?
Esta es probablemente la pregunta más difícil que nos podamos hacer, y con esto, no me refiero a que tengamos dudas sobre quiénes somos y nuestras capacidades; sino a que somos tan diferentes y únicas, que es imposible encasillar el significado en una sola definición.
Nos hemos tardado años en comprender que podemos convertirnos en todo eso que soñamos desde niñas, sin importar lo abstracto o imposible que parezca. Es por esta misma razón que cuestionarnos sobre “qué significa ser mujer” es una respuesta que NO puede ser universal, porque no todas nos hemos enfrentado a las mismas circunstancias sociales.
Cada mujer es un libro abierto con una historia distinta que contar. Para bien o para mal, hemos aprendido el significado de manera distintas.
A veces puede parecer un sufrimiento sin salida, pero si nos damos el tiempo de reflexionar, podemos encontrar que el dolor también otorga el poder de la valentía, de resiliencia y de fuerza para enfrentar cualquier obstáculo.
Entender que NO todas hemos tenido las mismas oportunidades es el primer paso para manejar el arma más peligrosa que se haya creado, la sororidad, la auténtica bomba atómica que puede terminar con la peor de las guerras que ha terminado con millones de vidas, el machismo.
