Oaxaqueño e hidalguense ganan estímulo del Imcine
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Arte y Cultura

Oaxaqueño e hidalguense ganan estímulo del Imcine

El cortometraje es uno de los últimos filmes en que participó el primer actor Ignacio López Tarso


Foto: Cortesía ARTRE FILMS / La historia de “Curandero” es acerca del duelo y de la aceptación de la muerte, con tintes de la época de oro del cine mexicano.
Foto: Cortesía ARTRE FILMS / La historia de “Curandero” es acerca del duelo y de la aceptación de la muerte, con tintes de la época de oro del cine mexicano.

Con una historia sobre el duelo y la aceptación de la muerte, pero que también plantea los contrastes de un país como México, el oaxaqueño Fernando Moisés Hernández Córdoba y el hidalguense Armando Arenas ganaron uno de los estímulos del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), el de Fomento al Cine Mexicano.

“Curandero” es el nombre del cortometraje con el que ambos y otros compañeros más producirán esta cinta, una de las últimas que protagonizó el fallecido actor Ignacio López Tarso y en quien se inspiró el director para esta producción.

En entrevista, el estudiante oaxaqueño y director de fotografía del filme cuenta que la historia de “Curandero” es acerca del duelo y de la aceptación de la muerte, con tintes de la época de oro del cine mexicano. Esto a manera de “recorrido por las cosas de (Luis) Buñuel” o con referencias a “Macario”, la película que inmortalizó a López Tarso.

Afortunadamente pudimos grabar voz con el maestro López Tarso antes de que falleciera, el interpreta la voz de un personaje, el curandero”, explica el originario de la capital oaxaqueña sobre la película que transcurre en Acaxochitlán, Hidalgo, “una zona de brujos”. Y por lo cual el equipo ha estudiado proyectos fotográficos como los de Graciela Iturbide, Gabriel Figueroa y de Juan Rulfo, a fin de “retratar la zona rural de México”.

Pensado como una producción en blanco y negro, Hernández detalla que “la idea de la foto es sí construir una realidad tangible” y que este recurso ayudará a mostrar los contrastes: lucha, aceptación, duelo, pérdida.

La dirección de fotografía es muy amplia, se trabaja de manera directa con el director y otros, como el director de arte y el de sonido, señala el oaxaqueño respecto a su labor para este proyecto.

La labor del director de fotografía son todas las cosas que están a cuadro y que no son físicas, la luz, la forma en que la óptica interpreta el mundo, la idea de la dirección de foto es darle una identidad visual al proyecto, que sea acorde a lo que se está contando y que apoye emocionalmente lo que dramáticamente se está contando en la pantalla”.

Para él, que la historia hable de los contrastes es una manera de reflexionar también sobre el cine que se hace en el país y en su natal Oaxaca. Él, que estudia cinematografía en la Benemérita Universidad de Puebla, subraya que ante la falta de oportunidades en Oaxaca tuvo que emigrar y que aun para grabar o producir en su estado no hay muchas oportunidades.


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