El doctor José Edmundo Larumbe Lozano nació en la ciudad de Linares, Nuevo León, en 1888. Estudió en el Colegio Civil de Monterrey, así como en el Ateneo Fuente de Saltillo, Coahuila. Realizó estudios profesionales, obteniendo en 1910 el título de médico cirujano en la Facultad de Medicina. Asistió a la Clínica Oftalmológica de la Facultad de Medicina en París (Hospital Dieu) en 1914, siendo nombrado monitor de la misma hasta febrero de 1915.
En abril de 1916 ingresó a la Primera División Regional de Caballería de Coahuila con el grado de teniente coronel auxiliar y dos años después obtuvo el de teniente coronel médico cirujano. A partir de entonces fue nombrado director del Hospital Militar en Oaxaca, cargo que desempeñó hasta el 31 de diciembre de 1930, cuando dicho Hospital fue suprimido. En esta ciudad estableció su consultorio en la céntrica calle de Las Casas.
A fines de 1924, el general Onofre Jiménez, entonces candidato a gobernador de Oaxaca, le informó que en el pueblo de Tiltepec había muchos habitantes ciegos, por lo que, como parte de un viaje a Valle Nacional, llegó a ese lugar el 5 de abril de 1925, encontrando que de los 400 habitantes de la población, quienes vivían en la pobreza extrema en una comunidad infestada por murciélagos, el 5% tenían ceguera, el 50% tenían grave deficiencia visual y la totalidad tenían quistes en el cuello y nuca que eran notorios a simple vista.
Los resultados de sus visitas fueron publicados en artículos del periódico “El Universal”, en abril y junio de 1925 y noviembre de 1926. Después de su primer viaje a Tiltepec, el doctor Larumbe recibió una carta del doctor Rodolfo Robles, de Guatemala, en la que le refirió sus experiencias sobre la oncocercosis en su país, la cual le hizo sospechar que los enfermos de Tiltepec tenían esta enfermedad.
En su segundo viaje a Yagila regresó con un grupo de seis pacientes a la capital, los cuales fueron presentados en sesión de la Sociedad Médica de Oaxaca el 25 de noviembre de 1926 y en algunos de los cuales extirpó al día siguiente los nódulos, frente a varios médicos de la localidad. Durante sus viajes recibió el apoyo de diversas personas, destacando entre ellos el señor Alfonso Tort Santibáñez, quien fue “su brazo derecho” en sus trabajos sobre oncocercosis y se constituyó en guía, recolector de muestras y hasta en extirpador de nódulos, siéndole de gran ayuda.
Para 1930, la investigación acerca de este padecimiento había cobrado auge, se creó la Comisión del Mal del Pinto y de la Oncocercosis, para el estudio y control de estas enfermedades; ese año el Dr. Larumbe llevó a la Ciudad de México a tres pacientes de Camotlán, en uno de los cuales, llamado Pedro Ilescas el doctor Juan Luis Torroella, jefe de Oftalmología en el Hospital General de México, identificó por primera vez en el mundo a las microfilarias vivas en la cámara anterior del ojo, hallazgo confirmado más tarde por el patólogo Isaac Ochoterena Mendieta. A decir del distinguido doctor Manuel Martínez Báez “Larumbe, Torroella y Ochoterena fueron los primeros que hicieron aportación científica valiosa al conocimiento de la oncocercosis entre nosotros…”
El doctor Larumbe falleció el 23 de marzo de 1956 y hoy, en el acceso principal del Hospital “Presidente Juárez” del ISSSTE, hay un busto del distinguido médico que nos recuerda en silencio sus valiosas aportaciones a la lucha contra una enfermedad por fortuna erradicada.
Héctor Eloy Álvarez Martínez
Corresponsalía en Oaxaca “Ing. Alberto Bustamante Vasconcelos”