Familiares de una estudiante del Centro de Bachillerato Tecnológico, Industrial y de Servicios (CBTis) 265, localizado en San Jacinto Amilpas, acusaron actos de discriminación y negación al derecho a la educación en el plantel.
Los hechos derivaron después de que un alumno filtró un examen en el mes de diciembre a los grupos de quinto grado, situación que es sancionado en el plantel.
Sin embargo, en el momento de llamar a cuentas, dos estudiantes que no tuvieron injerencia en este hecho fueron señalados como los responsables y suspendidos, sin realizar el trámite de reinscripción y perdiendo un año de estudios.
Ante lo que consideraron como una violación a los derechos humanos, los familiares decidieron interponer un amparo ante los juzgados federales y acudieron a instancias de derechos humanos.
De eso, un juez federal otorgó el amparo a la parte afectada y pidió un informe pormenorizado de la situación, así como dio vista al Ministerio Pública, porque se están violentando derechos humanos de una estudiante.
Lejos de castigar al responsable, goza de impunidad por ser hijo de un conocido político y al servicio de la subdirección, y tampoco sancionó a todos los involucrados en este hecho”, dijo”, denunciaron los familiares de una de las estudiantes que se le permitió su reinscripción.
Agregaron que la subdirectora Nidia Hernández Cruz vio al más vulnerable, de escasos recursos y al no tener quien la defendiera, le dio de baja de la escuela sin darle derecho a defensa alguna.
Hoy la subdirección amenaza a los estudiantes que quien diga la verdad será dado de baja y correrá la misma suerte. La escuela debió sancionar al 100% de los responsables, autores y coautores, sino será un acto de discriminación”, acusaron.
La familia esperó que haya aplicación de la ley y que los estudiantes falsamente señalados, recuperen su semestre que sería el último.
