Es plausible el rescate de la añeja usanza oaxaqueña del Tequio como ayuda, contribución comunitaria para ejecución y concreción de un fin, sea este una obra, una acción o tarea a partir de la suma de voluntades; pero una parte fundamental del Tequio es la planeación y la definición de una tarea prioritaria para el bien común, que el esfuerzo sea bien aprovechado y mejor concretado. Sin duda se “agradece” que desde el gobierno del estado se aliente su recuperación, sin embargo, seguir en el camino de los intereses políticos para la foto simplemente desvirtúa esa tradición. Nos explicamos.
Tlacolula ocho horas del domingo 7, el gesto de fastidio e irritación del personal de la Secretaría de las Infraestructuras y Comunicaciones, de coordinación general de Jurisdicciones Sanitarias de la Secretaria de Salud de Oaxaca; de la dirección general de Notarías y Archivo General; de la Oficina de Pensiones del Estado; del Colegio de Bachilleres del Estado de Oaxaca, del Instituto de la Función Registral del Estado de Oaxaca, de la Coordinación Estatal de Protección Civil y Gestión Integral de Riesgos; del Consejo Estatal para la Prevención y Control del SIDA, y del Consejo Oaxaqueño de Ciencia, Tecnología e Innovación, todos convocados para limpiar la unidad deportiva de la población.
Citaron a los burócratas mediante un oficio o de manera verbal y, la mayoría, debió llegar por sus propios medios. ¿Requería en verdad un gran Tequio la unidad deportiva de Tlacolula o, como todos los distractores de la 4T, sólo sirvió para la foto? Y lo que hemos señalado ¿sirve de algo quitarle un día de descanso a la de por sí cómoda vida de burócratas?
¿Por qué no, por ejemplo, organizar una cruzada durante los dos o tres días en que se extendió la fase más grave del incendio del bosque en los parajes del Ocotal y General Camacho en Santos Tomás Mazaltepec? Los habitantes de dicha comunidad lanzaron un angustioso SOS en busca de ayuda a través de redes sociales. Solicitaban agua, pan, alimentos y, sobre todo manos de apoyo. No para combatir el incendio, por el grave riesgo que implicaba, sino para elaborar alimentos, tortas o llevar agua para que fuera distribuida entre los voluntarios. Fue la propia comunidad que organizó, este si, un verdadero Tequio que incluso concentró a algunos habitantes de comunidades cercanas. Del gobierno, silencio sepulcral.
¿Por qué no los titulares de esas dependencias que acudieron a Tlacolula organizaron equipos de voluntarios para llevar víveres e, incluso, elaborar tortas para quienes combatían en incendio? Los dejaron solos y Mazaltepec debió resolver solo, por sus propios medios, la catástrofe. El gobierno solo se limitó a realizar el recuento de daños.
¿Dónde estaban las diputadas del distrito electoral 3 federal, Margarita García García o Tania Caballero Navarro, nuera del gobernador Salomón Jara? ¿Por qué no lanzaron una convocatoria en favor de la comunidad a la que representan, acercar o, por lo menos “gestionar” auxilio federal o estatal?. Está entre sus funciones.
Ese solo apoyo, sin duda, es más provechoso que 20 o 30 “Tequios Bienestar” que realicen funcionarios desde cualquier oficina de gobierno del estado. Por cierto, ambas diputadas están en la lista de personas non gratas que estaría confeccionando la comunidad de Santos Tomás Mazaltepec contra quienes no movieron un dedo para apoyarlos.
Encueran al STPEIDCEO
¿Es en serio? Preguntamos cuando vimos la imagen de un espectáculo de striptease masculino en la que, nos dijeron, fiesta del Día de las Madres ofrecida por ¡el Gobierno del Estado! a las madres burócratas afiliadas al Sindicato de Trabajadores de los Poderes del Estado e Instituciones Descentralizadas de Carácter Estatal de Oaxaca (STPEIDCEO).
En redes sociales un hombre realiza movimientos sensuales y jala hacia el escenario a una presunta trabajadora a quien simula hacerle el amor. Todo ello en el festejo por el Día de las Madres, llevado a cabo en el parque El Tequio. Que por cierto, provocó un gran caos en la circulación de la zona el día de ayer.
¿De quién fue la idea? ¿No había algún otro espectáculo más gratificante para ofrecerle a las madres? No somos mojigatos, tampoco persignados o volteamos a otro lado con doble o falsa moral, no. Sin embargo, ¿no se insulta y rebaja de nivel cultural a madres trabajadoras con ese aberrante espectáculo? ¿No es machismo, sexismo, violencia de género “celebrar” de esa manera a las mujeres-madres trabajadoras?
Al rato los hombres muy bien podrían solicitar en su pliego petitorio la presentación de teiboleras, bebidas alcohólicas incluidas, para la celebración, por ejemplo, del Día del Padre.
Dos comentarios tomados de redes sociales: “¿Cómo cuántos millones costó organizar esa pu..? ¿Quién la organizó, quién la facturó? ¿Por qué los impuestos de todos ahora pagan esa pu…?
O lo señalado por el usuario @“Aquí hay una incongruencia de ambas partes: El gobierno que pregona que atiende, respeta y protege a las mujeres del abuso de los hombres, las mujeres que exigen respeto y se acaben estas prácticas sexistas de los hombres”.
