Rescatan jóvenes una tradición de Semana Santa

Hablar de Semana Santa en Tehuantepec es contemplar una de las expresiones más hermosas del ciclo festivo zapoteca. La Cuaresma y la Semana Mayor en esta tierra tropical van más allá de los actos litúrgicos propios de la iglesia católica universal, pues es aquí en “guissi” donde la pasión y muerte cobran especial relevancia entre los zapotecos que ven en el Varón de Dolores una de las máximas representaciones en las cuales vuelcan su devoción, quizá con una reminiscencia del culto prehispánico a los dioses de Mictlán.

En la ciudad de Tehuantepec se viven días de luto y fe durante la Semana Mayor, luto que se refleja en la indumentaria de la mujer tehuana zapoteca quien ha sabido conservarla de generación en generación y que la ha acompañado en su fe.

Esta época del año nos deja ver todo un crisol de ritos, colores, aromas, sabores y rostros de hombres, mujeres y niños que dan vida a la Cuaresma y Semana Santa. Es la mujer tehuana la principal protagonista de estas celebraciones, no sólo en su vestimenta sino en su trabajo comunitario y su papel como depositaria de la tradición.

A pesar de ser una celebración universal y de que también se lleva a cabo en los demás municipios del Istmo de Tehuantepec, este lugar destaca por la solemnidad y el fervor con el que se llevan a cabo estas ceremonias llenas del misticismo en el que refrendan el título de Tehuantepec como la “Capital espiritual del istmo”.

Esta exposición titulada “Luto y fe” muestra el trabajo, el talento y la visión de jóvenes fotógrafos que con su lente captan emotivamente cómo se viven estos días de devoción, como un símbolo vivo de la identidad zapoteca, esto lo describe Daniel Peña Alegría. Los fotógrafos expositores son: Carlos Solís, Claudia Daowz, Claus Mendoza, José de Jesús Gallegos, Juana Pola, Luis Quiroga, Rogelio Chicatti y Veydha Hernández.

 

 

Creatividad

 

Los textos de las imágenes son diversos, una muestra la promesa y la fe que hacen los devotos y que hay que cumplir, fue tomada en el barrio de Santa Cruz de Tehuantepec.

Otra con pequeñas escenas y elementos emocionales de esperanza lo que nos detiene a realizar una introspección buscando paz para darle sentido a lo que se observa y lo que se realiza durante estos días.

Otro personaje creativo nos manifiesta la fe de un niño en estos días santos, y el gran impacto que tienen sobre nuestra cosmovisión: la música, los sonidos y los rezos que son una parte poderosa de nuestros recuerdos.

¡Perdón, oh Dios mío!, este momento representa la interacción final con el Santo Entierro de Catedral en la iglesia del barrio Laborío, imagen que es incensada por el principal del mismo barrio.

Pasión Cruz Cueva en semana santa. El centro de la cueva del barrio Lieza, es uno de los lugares sagrados de Tehuantepec, el Viernes Santo Jesucristo es bajado de la cruz y es velado toda la noche por personajes que cumplen alguna promesa, lo cual realizan con mucha devoción.

Por nuestros pecados, es una réplica de los instrumentos de castigo y tortura utilizados en el calvario, la corona de espinas, el látigo, además una reprografía de la sábana santa de Turin.

 

 

Crítica

 

Lo importante de esta exposición fotográfica, es lo que con un lente se visualiza, el acto o la persona a quien observan para captar el momento, la estampa creada por la visión o el ángulo que toma en su momento preciso el creador con la capacidad de hacer el disparo en el momento preciso de escena.

La fotografía es un arte que se viene dando desde el siglo pasado a través del enfoque de un lente. Antiguamente se tomaba con tela oscura, con la cámara de tripie, inmediatamente se metía a una cubeta en tinta negra. Sin embargo, fue evolucionando hasta este siglo cuando se puede tomar con el teléfono o con una cámara especial para fotografía.

Estos jóvenes expositores ya tienen una experiencia creativa que dieron a conocer en su tierra natal.

 

Con información de Dolores Jiménez