En los últimos meses el precio del huevo se fue “hasta las nubes”, coincidieron amas de casa e introductores del producto que es traído principalmente del Estado de Tehuacán, Puebla. En contraparte, el salario mínimo de los trabajadores se encuentra estancado.
María del Carmen Contreras —entrevistada cuando realizaba sus compras en un negocio ubicado sobre la calzada Símbolos Patrios a la altura de la Experimental— dijo que en los últimos meses del 2017, el casillero de huevos con 30 piezas costaba entre 35 y 40 pesos.
Actualmente, comentó la ama de casa esta misma cantidad en algunos lugares alcanza un precio de entre 70 y 80 pesos; aunque en otros su precio es de casi 60 pesos “el valor del casillero o medio casillero de huevos varia de un lugar a otro, pero en donde quiera está muy caro, subió más de la mitad”.
Omar Sandoval, quien trabaja en un negocio al mayoreo del Mercado de Abasto, dijo que el alza del huevo se da principalmente en las tienditas de la esquina o en otros tipos de negocios donde no tienen mucha venta, “a nosotros no nos conviene subir el precio porque se nos queda el producto”, asentó.
Sara García comentó que un kilo de huevo blanco se vende a un precio máximo de 32 pesos y el rojo llega a costar 34 pesos, cuando a finales del año pasado este mismo peso tenía un precio al público en general de 28 y 30 pesos, lo que viene afectar la economía de los que menos tienen.
Sandoval reconoció que el costo por caja del producto se ha elevado debido al alza de los combustibles, una caja de huevo llega a costar hasta 700 pesos, cuando el año pasado tenía un costo de menos de la mitad, atribuyendo el problema al alza de la gasolina que está a casi 20 pesos el litro.
Amas de casa entrevistadas por separado el día de ayer, dijeron que la mayoría de los productos de la canasta básica están incrementando su precio, al grado de que 100 pesos ya no alcanzan para comprar nada; sin embargo, el salario mínimo no sube.
