Magisterio sigue paro de 72 horas en el Istmo de Oaxaca

Maestros de la Sección 22 realizaron una marcha por las principales calles del municipio para protestar y exigir que se detenga la evaluación colectiva a normalistas y rechazar la ley de seguridad interior que pretende implementar el gobierno federal.

En esta marcha participaron alrededor de 200 profesores adheridos a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación quienes iniciaron una lucha desde este domingo y que concluirá el martes.

De acuerdo con Leoncio Rogelio Vásquez Valderde, representante del magisterio, expresó que esta jornada continuará de manera incesante para exigir al gobierno federal cumplir con el pliego petitorio.

En ese sentido, expresó que también se manifestaron para rechazar las reformas estructurales que pretenden imponer al magisterio en la entidad.
Ésta, dijo, es una lucha de 72 horas que han iniciado los maestros y fue uno de los resolutivos del quinto congreso que realizaron sus compañeros del comité ejecutivo estatal de la Sección 22.

Los maestros realizaron una serie de protestas y consignas como la falta de reconstrucción de escuelas, mercados y viviendas por la omisión de los tres niveles de gobierno.

Asimismo, rechazaron las reformas que atentan contra la educación en Oaxaca que pretende implementar el gobierno federal para tenerlos controlados mediante una dictadura.

Al concluir el en palacio municipal, los maestros llevaron a cabo un mitin en donde dieron a conocer las acciones a realizar en el municipio como lo es la toma simbólica de las dependencias gubernamentales.

“Nuestra lucha continúa, no nos hemos detenido en lo absoluto y vamos a seguir insistiendo en que las reformas atentan contra la educación de los oaxaqueños”, añadió.

Los maestros demandaron al gobierno federal y del estado poner mayor atención en las escuelas que hasta el momento continúan sin apoyo, después de sufrir graves daños a consecuencia del terremoto del pasado 7 de septiembre.

Lo anterior, denunciaron, impide darle a los alumnos una educación de calidad por las condiciones en las que reciben clases.