Muchas tradiciones de Wimbledon son inmunes al paso de los años. Una que lo hace único entre los cuatro Grand Slams es The Queue (La Fila), en la que no se pone su boletaje a la venta por adelantado para que los aficionados puedan ir a las taquillas antes del inicio de la jornada.
Wimbledon no sería el certamen con más prestigio sin sus particulares reglas, y si quieres comprar uno de esos boletos debes esperar en esta fila muchas horas, incluso días. Esta espera en sí ya es un gran acontecimiento que se realiza desde principios del siglo XX.
Para esta edición The Queue ha gozado de una demanda pocas veces vista en antaño gracias al buen clima y la presencia de los mejores jugadores de la última época: Roger Federer, Andy Murray, Rafael Nadal y Novak Djokovic. Alrededor de siete mil personas se presentaron al primer día de The Q de la edición 131 del certamen que ya tiene 140 años desde su primera edición. Algunos aficionados aguardaron hasta 40 horas para comprar boletos antes del inicio del primer juego.
El primer paso para participar en The Q es llegar a Wimbledon Park, área de recreación frente al SW19 (dirección de Wimbledon), donde voluntarios con banderas verdes te asignan un lugar para montar tu tienda de campaña.
“Llegué el miércoles a las nueve de la mañana, porque quería boletos para el jueves en la cancha central. Llegas al parque y los voluntarios te otorgan un lugar para poner tu tienda sin saber si vas a lograr a entrar al estadio al día siguiente, porque sólo hay 500 boletos por día para el estadio”, explicó Jorge Forastieri, mexicano que asistió a Wimbledon por esta vía.
Ante la popularidad de esta tradición, la organización estableció numerosas reglas: no puedes reservar tu lugar con objetos, es un boleto por persona y todo aquel que quiera ingresar debe formarse sin ausentarse de su lugar por más de media hora. Aquellos que acampan pueden llevar su comida y bebida así como juegos de mesa o pelotas para entretenerse.
“Es increíble la convivencia con las tiendas de campaña a tu alrededor, algunos llegan desde el principio de la semana, otros permanecen todo el torneo. Tomas cerveza y conoces a gente”.
La música y juegos deben finalizar a las 22:00 horas, pues a las 5:30 llegan los stewarts (voluntarios) a pedir que desarmes tu tienda y la lleves a la carpa en la que guardarán tus pertenencias en lo que asistes a los juegos. A las 7:00 te entregan un brazalete y te encaminan hacia la taquilla del All England Lawn Tennis Club. Debes pagar tu boleto, que oscila entre 25 libras los primeros días y 190 libras para la final, en efectivo. Siguiente paso: disfrutar del mejor tenis del mundo.
The Queue es el lugar donde personas de todas edades, nacionalidades se encuentran con un solo fin: pagar un precio justo por ver lo mejor del deporte blanco en la Catedral del tenis.