La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) ha emitido una alerta urgente sobre los peligros asociados con el medicamento Ocaliva (ácido obeticólico), especialmente en pacientes con cirrosis avanzada. Según los estudios más recientes de la agencia, este fármaco puede causar fallas hepáticas graves, incluso llevando a los pacientes a necesitar un trasplante de hígado.
¿QUÉ ES LA OCALIVA Y POR QUÉ REPRESENTA UN RIESGO PARA LOS PACIENTES?
Ocaliva es un medicamento utilizado para tratar ciertas afecciones hepáticas, como la colangitis biliar primaria (CBP). Sin embargo, investigaciones recientes han mostrado que los pacientes con cirrosis avanzada que consumen este medicamento corren un riesgo elevado de sufrir graves lesiones hepáticas. En consecuencia, la FDA ha restringido su uso desde 2021 y ha actualizado sus pautas de seguridad, indicando la necesidad de un monitoreo frecuente de la función hepática en estos pacientes.
A pesar de las advertencias previas, la FDA descubrió que muchos pacientes con cirrosis avanzada y colangitis biliar primaria (CBP) continúan usando Ocaliva, poniendo en riesgo su salud. Según los datos de la agencia, el 7% de los pacientes con menor riesgo de progresión necesitaron un trasplante, mientras que en el grupo con placebo, 1 de cada 68 pacientes también requirió un trasplante.
RECOMENDACIONES PARA PROFESIONALES Y PACIENTES
La FDA ha emitido un comunicado instando a los profesionales de la salud y a los pacientes a monitorizar con frecuencia los análisis hepáticos y a interrumpir el uso de Ocaliva en caso de que se detecten señales de empeoramiento de la función hepática. Sin embargo, los expertos advierten que pausar el medicamento no garantiza evitar las complicaciones hepáticas.
Los médicos han recomendado, además, evitar recetar Ocaliva a pacientes con riesgo elevado y sugerir alternativas de tratamiento para prevenir daños hepáticos graves.
SÍNTOMAS QUE LOS PACIENTES DEBEN VIGILAR
Es crucial que los pacientes estén alertas a ciertos síntomas que podrían indicar complicaciones hepáticas graves. Si experimentas alguno de los siguientes signos, debes consultar a tu médico inmediatamente:
- Hinchazón en el vientre
- Ojos o piel amarillos
- Heces negras o con sangre
- Tos o vómitos con sangre
- Cambios en el estado mental, como confusión, dificultad para hablar, cambios de humor, somnolencia o dificultad para despertarse.
La FDA ha hecho un llamado a la precaución, dado que Ocaliva puede causar daños hepáticos severos que, en algunos casos, requieren un trasplante de hígado. Los pacientes que usan este medicamento deben hablar con su médico sobre los riesgos y considerar tratamientos alternativos. El monitoreo constante de la función hepática es fundamental para evitar complicaciones graves.
Si estás tomando Ocaliva, no dudes en consultar con tu médico sobre los posibles riesgos y las alternativas disponibles.