¿A qué se debe y cómo evitar la obesidad infantil?
La OMS atribuyó la obesidad infantil al desequilibrio entre la ingesta calórica y el gasto calórico; mujeres que aumentan más de 18 kilos son más propensas a tener bebés grandes.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el aumento en la obesidad infantil se debe a diversos factores como la ingesta de alimentos calóricos, así como disminución de la actividad física.
Por lo anterior, señalaron que se registró un cambio dietético a nivel mundial pues aumentó la “ingesta de alimentos hipercalóricos con abundantes grasas y azúcares, pero con escasas vitaminas, minerales y otros micronutrientes saludables”. Aunado a la disminución de la actividad física entre los menores de edad.
“La obesidad infantil se asocia fundamentalmente a la dieta malsana y a la escasa actividad física, pero no está relacionada únicamente con el comportamiento del niño, sino también, cada vez más con el desarrollo social y económico y las políticas en materia de agricultura, transportes, planificación urbana, medio ambiente, educación y procesamiento, distribución y comercialización de los alimentos”, indicó la OMS.
Además, el portal Salud 180 explicó que las mujeres que aumentan más de 18 kilos durante el embarazo son más propensas a tener bebés grandes, así como a desarrollar diabetes gestacional.
Asimismo, indicaron que la genética es un factor que afecta en menor medida, ya es más sencillo heredar y enseñar hábitos alimentarios sanos.
Algunos de los padecimientos que podrían sufrir los niños con obesidad en la edad adulta son:
*cardiopatías
*resistencia a la insulina (con frecuencia es un signo temprano de diabetes inminente)
*trastornos osteomusculares (especialmente artrosis, una enfermedad degenerativa muy discapacitante que afecta las articulaciones)
*algunos tipos de cáncer (endometrio, mama y colon)
*discapacidad
Para evitar la obesidad infantil, la OMS recomienda lo siguiente:
*el inicio inmediato de la lactancia materna durante la primera hora de vida
*la lactancia exclusivamente materna durante los seis primeros meses de vida
*la introducción de alimentos (sólidos) complementarios nutricionalmente adecuados e inocuos a los 6 meses, manteniendo al mismo tiempo la lactancia materna hasta los 2 años o más
Además, detallaron que los alimentos deben ser ricos en nutrientes y deben tomarse en cantidades adecuadas.
A partir de los seis meses, deben darse alimentos sólidos en pequeñas cantidades, que irán aumentando gradualmente.