La violencia en las calles de Oaxaca sigue siendo protagonizada por miembros de sindicatos de transportistas. Siendo esta una problemática que agrava la seguridad y convivencia de la ciudadanía. Este lunes, un video que circuló en diversas redes sociales y grupos de WhatsApp evidenció la agresividad de uno de estos trabajadores del volante, quien, tras un altercado vial, utilizó un machete para intimidar a un conductor de la línea de Transporte Urbano de la Ciudad de Oaxaca (Tucdosa). Los hechos ocurrieron a plena luz del día, en el cruce de las avenidas Universidad y La Campiña, justo frente a la tienda SAM’S CLUB.
#Enterate Con machete en mano transportistas se pleitean en Av. Universidad esquina con Av. La Campiña en #Oaxaca pic.twitter.com/YMS5Q8BoBI
— El Imparcial de Oaxaca (@ImparcialOaxaca) February 24, 2025
EL ACONTECIMIENTO
En el impactante video, se puede observar cómo el chofer de una pipa, destinada a vaciar fosas sépticas, saca un machete con el que amenaza al conductor del camión urbano. La agresión se muestra con tal nivel de ferocidad que el chofer de la pipa intenta hacer uso de su arma blanca para imponer su autoridad sobre el otro conductor. Quien, aparentemente, había estado involucrado en un altercado vial menor.
Y es que, la escena, que duró solo unos segundos, deja en evidencia el comportamiento errático y violento al que muchos transportistas se ven abocados, resolviendo sus disputas a golpes o con amenazas, sin importar la seguridad de los demás.
RIÑAS FRECUENTES
Este tipo de sucesos no es aislado, ya que son frecuentes las escenas de agresiones físicas o verbales entre choferes de diversas líneas de transporte, quienes, bajo el amparo de sus sindicatos, parecen estar por encima de la ley. La impunidad con la que muchos de estos transportistas actúan provoca una creciente preocupación en la sociedad, pues no sólo ponen en peligro la vida de otros conductores, sino que también crean un ambiente de inseguridad constante para los peatones y ciudadanos en general.
Diversos usuarios de redes sociales han mostrado su repudio ante estos hechos, exigiendo que las autoridades correspondientes tomen medidas urgentes para frenar la violencia en el transporte público y privado. Los ciudadanos apelan a la Secretaría de Movilidad para que intervenga y sancione a aquellos transportistas que recurren a la violencia como forma de resolver sus disputas. La indignación se ha multiplicado, ya que estos actos no solo reflejan un comportamiento inaceptable, sino también la falta de control de las autoridades que, pese a las denuncias recurrentes, no han logrado poner un freno real a este tipo de conductas.
FALTA MANO DURA DE AUTORIDADES
En un contexto en el que los servicios públicos de transporte son esenciales para el desarrollo de la ciudad, la violencia entre los transportistas pone en riesgo no solo el bienestar de los usuarios, sino también la estabilidad social en general. Los ciudadanos demandan que el gobierno implemente estrategias más efectivas que aseguren que el servicio público de transporte se realice de manera segura, respetuosa y libre de agresiones.
Finalmente, el llamado es claro: es momento de que las autoridades de movilidad actúen con firmeza y controlen la situación antes de que los incidentes violentos escalen a consecuencias aún más graves. La tolerancia hacia el comportamiento violento de los transportistas no debe seguir siendo la norma, y la ciudadanía ya no está dispuesta a seguir siendo víctima de los desmanes de quienes, lejos de garantizar seguridad, la siembran con cada altercado.
