PEGATINAS REIVINDICATIVAS

Alebrijes en el limbo

El miércoles 16 de febrero, en el Diario Oficial de la Federación (DOF), fue publicada la “Declaración de protección de la Indicación Geográfica Tallas de Madera: Tonas y Nahuales, Artesanías de los Valles Centrales de Oaxaca”. Esta publicación culmina un esfuerzo institucional del gobierno del Estado de Oaxaca para otorgar protección a las artesanías de la entidad. No obstante, lo que se trazaba para ser un avance, quizá no lo sea tanto.

La historia inicia años antes, cuando artesanas y artesanos de los Valles Centrales piden apoyo al gobierno estatal para contar con mecanismos jurídicos que eviten el plagio de las artesanías, especialmente de los alebrijes. Con no mucho ánimo -salvo de contados servidoras y servidores públicos- se inicia un trámite ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) para poder dotar de una protección denominada indicación geográfica a alebrijes, tonas, nahuales y tallas de madera.

La indicación geográfica, de conformidad con la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, “es un signo que se utiliza en productos que proceden de un lugar geográfico concreto y que tienen cualidades o una reputación que se deben a ese lugar. Para constituir una indicación geográfica, un signo debe identificar un producto como originario de un lugar determinado” (https://bit.ly/3GZdmoF). Es decir, la designación de una indicación geográfica permite identificar un producto con su lugar de origen, desincentivando la comercialización de productos similares que no provengan del lugar al que se ha vinculado mediante el mecanismo jurídico.

Tras el inicio del trámite, se logró consolidar una solicitud ante el IMPI misma que fue admitida, lo que significó un importante adelanto en la gestión de la indicación de origen. Sin embargo, la admisión y publicación de la solicitud fue anunciado con bombo y platillo por el gobierno del estado como si se tratase del otorgamiento de la protección. Mediante el boletín “Oaxaca reciben la primera Indicación Geográfica de México, los alebrijes no podrán ser plagiados, imitados o robados”(https://bit.ly/3v06Xam), el Ejecutivo Estatal dio a conocer el logro cuando apenas se trataba de la publicación de la solicitud en el Diario Oficial de la Federación (https://bit.ly/3s1Xcqt).

El hecho pasó desapercibido y se asumía como consumado.

Duro revés, cuando el pasado miércoles la Declaración publicada en el DOF, en primer lugar, establecía una denominación completamente diversa a la solicitada. Mientras la solicitud establecía “Alebrijes, Tonas, Nahuales y Tallas de Madera de los Valles Centrales de Oaxaca”, la Declaración impone falta de claridad en la determinación de las artesanías protegidas al establecer: “protección de la Indicación Geográfica Tallas de Madera: Tonas y Nahuales, Artesanías de los Valles Centrales de Oaxaca”, haciendo difícil su implementación. Como es más que notorio, adicionalmente, es muy preocupante que las gestiones realizadas no hayan procurado la inclusión del término alebrije.

Quizá haya un argumento detrás de esta determinación, no obstante, en estos momentos parece más una falta de pericia técnica o interés por parte de la gran mayoría de los encargados del proceso que un razonamiento jurídico-administrativo.

Quedan ahora muchas interrogantes ¿Qué efecto tiene esta declaración? ¿Afectará a las y los artesanas? ¿Permitieron que las verdaderas y verdaderos interesados pudieran intervenir en la toma de decisiones sobre la formulación de la solicitud y sus términos? ¿Quién acompañó el proceso y en qué falló? ¿Es la ruta que debemos trazar para poder brindar protecciones a las y los pueblos, a sus saberes y sus elementos culturales?

Parece ser que aún estamos muy lejos de que el marco jurídico y sus operadores establezcan condiciones en las que efectivamente las y los artesanos, así como los pueblos, puedan contar con reconocimiento, capacidad de acción y determinación en las determinaciones legales y administrativas que afectan la producción y reproducción de elementos culturales propios. Claramente, los fallos en el trámite y comunicación de la declaración demuestran que no es prioridad en la agenda de gobierno el apoyo a las y los artesanos de Oaxaca.

¿Habrá cambio de rumbo al cierre de la administración? Improbable. ¿La siguiente administración tomará en serio un viraje en la matera? Veremos.

@GalateaSwanson