En días recientes

En días recientes conocimos que la Universidad Autónoma del estado de Hidalgo (UAEH), es señalada de presunto lavado de dinero de 156 millones de dólares, propietaria de 22 empresas, incluidos un hotel, un centro de seminarios, el Club Universitario Real del Monte, y la gasolinera Servi Garza, en Mineral de la Reforma. La concesión de ésta fue otorgada por Pemex en 2010.
Asimismo otras empresas propiedad de la escuela son Productora Universitaria de Lácteo (Prounilac), dedicada a la fabricación de quesos; el Salón Universitario para graduaciones; el Centro Deportivo Ceuni; el Polifórum Carlos Martínez Balmori; una casa productora de muebles, un periódico local, y estacionamientos.
Faltaba más y sobraba menos, en la Universidad Autónoma de Hidalgo se atendieron con la cuchara grande. Aunque no hay que restarle méritos a la obra social que el plantel realiza, la gasolinera es fuente de financiamiento para otorgar becas a estudiantes de escasos recursos, para proyectos académicos y de investigación, así como distribuidora de combustible para el transporte universitario, que por cierto, es otra de las empresas de la casa de estudios. Tiene 22 años de servicio y 44 unidades.
Por lo visto la Cuarta Transformación va con todo y utiliza su maquinaria pesada para arrasar contra todo lo que huela a corrupción, ya hemos comentado que ésta ha permeado en diversos sectores de la economía, y sólo Dios sabe hasta dónde llegarán para erradicar éste flagelo que tanto daño ha ocasionado a nuestro México.
El pasado viernes, Santiago Nieto Castillo, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, informó que la Universidad Autónoma de Hidalgo recibió 156 millones de dólares provenientes de países como Suiza, y Reino Unido, en 22 cuentas bancarias, las cuales se bloquearon para que el dinero no pueda ser utilizado mientras no se esclarezca el origen y destino de los recursos.
Desde luego el rector de la UAEH, Adolfo Pontigo, de inmediato desmintió a través de un comunicado que la institución haya lavado 156 millones de dólares, y adelantó que emprenderá “las estrategias legales que correspondan”.
Lo cierto es que más temprano que tarde, con los convenios y tecnología que hay en la actualidad habremos de saber qué fue lo que ocurrió, sin embargo también es verdad que cuando el río suena, agua lleva; y quizá en estos tiempos de la Cuarta Transformación sea verdad que no hay nada oculto bajo el sol.
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