Reconstrucción
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Opinión

Editorial

Reconstrucción

 


Ante la necesidad de cuidar y conservar el Centro Histórico de la ciudad, se debe trabajar para generar conciencia en la ciudadanía, promover el respeto y cariño por el patrimonio edificado.

Asimismo, urge refrendar el compromiso de promover la riqueza cultural de nuestra ciudad, acercar las manifestaciones artísticas a los habitantes de las 13 agencias y rescatar los espacios públicos, así como tradiciones y costumbres.

En nuestra capital se necesita acudir al rescate de viviendas que se encuentran en pésimas condiciones y amenazan con derrumbarse con el riesgo de que puedan causar algún accidente, como ya ha ocurrido, pues sin duda representan un peligro para los viandantes. En un 90 por ciento de los inmuebles, se puede apreciar diversidad de flora que brota en las azoteas y fachadas, lo que representa un verdadero peligro.

Pero también se debe exhortar a la ciudadanía a que cuiden y protejan plazas públicas porque es un espacio para las familias y son parte del patrimonio cultural de Oaxaca de Juárez, así como todos los inmuebles históricos que han dado identidad a nuestra ciudad. Una de las acciones de rescate, limpieza y mantenimiento, también se debe llevar a las fuentes ubicadas en diversos espacios públicos de la ciudad.

Así como a monumentos que se encuentran en la Calzada de la República y al mismo tiempo de rescate de los espacios públicos que permitan fomentar actividades deportivas y de esparcimiento familiar. Oaxaca de Juárez necesita ser conservada para que tenga su originalidad, las obras que ahora se hacen lo único que han logrado es distorsionar su esencia. Por eso se requiere reconstruir los inmuebles en mal estado y evitar la indiferencia de la misma sociedad para conservar y cuidar el patrimonio histórico de Oaxaca.

 

Atención social

 

En el contexto de austeridad, se debe asegurar que en el gasto social esté presente el interés superior de la niñez, lo que se logra ampliando servicios y que los niños ejerzan sus derechos sociales, así como el que las familias eleven sus ingresos. De otra forma no habrá reducción en la pobreza, ya que este problema puede provocar mortalidad infantil por enfermedades prevenibles, los primeros cinco años de vida son claves en crecimiento físico e intelectual, lo que se haga o se deje de hacer tendrá impacto para siempre.

Los niños y adolescentes en el país enfrentan carencias de seguridad social y acceso a la alimentación, pero se acentúan en estados como Oaxaca, Guerrero y Chiapas, donde los menores de una familia con padres jóvenes, bajo nivel educativo, con jefatura de familia femenina o si es de un hogar rural o indígena, tienen más probabilidad de enfrentar ésta y otras condiciones.

Ante escenario tan desolador, es fundamental la inversión en la infancia, ya que puede prevenir problemas como delincuencia juvenil, embarazos en adolescentes y violencia. En el país uno de cada tres mexicanos es niño o adolescente y dentro de ese sector poblacional los que sufren mayor pobreza radican en esas entidades.

Invertir recursos financieros para ayudar a que los niños sobrevivan y desarrollen plenamente su potencial es, ante todo, un imperativo moral.

Pero invertir en la niñez también es importante desde el punto de vista práctico, pues redunda en beneficio de las economías y las sociedades. Teniendo en cuenta que en la primera infancia se sientan las bases de la salud y el bienestar del individuo, el momento más oportuno para romper el ciclo de la pobreza. Destinar a la vacunación una suma adicional relativamente pequeña podría salvar hasta 1 millón de vidas infantiles, e invertir unos pocos miles de dólares adicionales en cada niño permitiría que complete su educación básica a la edad de 13 años.