Medallas de oro

No quiero oro ni quiero plata, yo lo que quiero es romper la piñata.

El mapache guasón      

En la semana que transcurre, se ha desarrollado una polémica en torno al equipo femenil de nado sincronizado de México. Resulta que el equipo, en El Cairo, Egipto, las mexicanas ganaron tres medallas de oro en nado artístico, y viajaron incluso sin auxilio económico del Gobierno Federal, es decir sin pago de avión, viáticos y gastos en general, al grado que declararon las nadadoras, que recurrieron al auxilio de Don Carlos Slim, quien, con una fundación, les proporcionó a las nadadoras cosa de un millón de pesos, con lo que solventaron lo necesario, y con el resultado descrito: Tres medallas de oro. Además, una de las competidoras declaró que tuvieron también que recurrir a la venta de artículos para ganar un dinerito extra.

En ese orden de ideas, la CONADE, a cargo de la señora Ana Gabriela Guevara, ex corredora de cuatrocientos meros planos, campeona mundial en la prueba de Pista y campo, rechaza despectivamente lo declarado por las nadadoras, y expresa que mienten, las llama ladronas, expresa que no han comprobado cuarenta millones de pesos, y que, si quieren vender “calzones, prendas o Tupperware”, que lo hagan.

En ese contexto, es deplorable la actitud de la señora Guevara, y manifiesta un ostensible desprecio por las nadadoras, amén de no reconocer en la CONADE ni registrar tan importante triunfo.

Los superiores de la CONADE deberían pedir la renuncia de Ana Gabriela Guevara.

Yo también soy Pueblo.

Por allí nos encontraremos.