Incendios

Graves, muy graves son los incendios en nuestros valles centrales.

Por eso nosotros los ciudadanos debemos tener cuidados extremos para no provocarlos.

El solo hecho de lanzar por la ventanilla del auto una colilla de cigarro, puede incendiar un bosque y causar víctimas humanas.

Si usted amigo lector es aficionado a los campamentos, no olvide apagar hasta el último grano de ceniza, y no soy exagerado cuando sugiero lo anterior, es más, un solo trozo de cristal expuesto al sol canicular de estas épocas, es suficiente para incendiar un trozo de pasto que crecerá hasta el incendio gigante que lleva a la muerte a cientos de roedores del bosque: castores, ardillas, conejos y otros animalitos, que incluso son alimento de nuestros pueblos campiranos.

Entonces querida lectora, amigo lector, lleve este mensaje a su familia menuda, y logrará que lo tengan como costumbre de vida.

Yo también soy Pueblo

Por allí nos encontraremos.