Maternidad y el derecho a la vida
El próximo martes 10 de mayo celebraremos en México el Día de las Madres. A convocatoria del periodista Rafael Alducin, con la respuesta favorable de la sociedad mexicana y de los medios de comunicación, por primera vez el 10 de mayo de 1922 se celebró el Día de las Madres, por lo cual México se convirtió en la primera nación de Latinoamérica en rendir un merecido reconocimiento a las madres.
En cuanto a la fecha elegida, información del extinto Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de México señala que se seleccionó mayo para este festejo, ya que ese es el mes consagrado a la Virgen, mientras que el día 10 fue elegido porque en aquella época en el país se pagaba en las decenas.
Es importante analizar cuál es la situación de la maternidad en la actualidad. De acuerdo a estadísticas, las nuevas generaciones han disminuido el número de hijos y por otro lado, también ha aumentado el número de mujeres que no quieren tener hijos. Esto es resultado de las políticas públicas impulsadas desde los 70 para reducir la población mundial, aunado a posiciones ideológicas sobre temas de género. En contraste, México tiene una alta tasa de embarazo adolescente.
La alta tasa de embarazo adolescente coloca a México en primer lugar en ocurrencia de embarazos en mujeres de 15 a 19 años dentro de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que en 2019 registraron una tasa promedio de 13.7 nacimientos por cada 1 000 mujeres de 15 a 19 años.
Estos datos dan cuenta del fracaso de las políticas de salud para detener el embarazo adolescente, y que lejos de frenarse parece que se hubiera promovido, los cual de espacio para el análisis y la evaluación.
A pesar de que existen apoyos para las madres que se encuentran en estos casos aun resultan insuficientes, por lo que es importante que se le apueste más a la educación y la información, sin sesgos ideológicos.
En Oaxaca, el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), beneficia con becas a jóvenes madres o embarazadas para que tengan la oportunidad de continuar y concluir sus estudios de nivel básico, como son la primaria y secundaria. Los apoyos corresponden al Programa Nacional de la Beca de Apoyo a la Educación Básica de Madres Jóvenes y Jóvenes Embarazadas, dirigido a mujeres de entre 12 y 18 años 11 meses de edad, y consta de un beneficio de 850 pesos mensuales hasta por 10 meses en un año, dependiendo del mes en que se solicite y la permanencia en la escuela.
Erróneamente, por intereses económicos de una industria, se ha promovido al aborto como una solución e incluso como un derecho. Nada más alejado de la realidad. Las mejores prácticas nos muestran que la educación en el embrazo responsable, en un marco de respeto a la vida y la libertad, dan mejores resultados.
Definitivamente el aborto no es la solución, aunque se ha puesto de moda por la gran cantidad de recursos inyectados a políticos y medios de comunicación.
El pasado lunes, de manera muy inusual, se filtró un proyecto de opinión de la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos que parece estar a punto de poner fin a su precedente legal de 49 años que protege el derecho al aborto en todo ese país.
El fallo anticipado en el borrador escrito por el juez Samuel Alito cambiaría radicalmente el acceso al aborto al dar a los estados la capacidad de decidir qué tan agresivamente pueden restringir el acceso al procedimiento.
Existe un grupo de países que defiende el Derecho a la Vida. La declaración del Consenso de Ginebra, firmada por países como Hungría, Egipto, Brasil, Indonesia, Uganda, Rusia y Guatemala promueve la salud de las mujeres sobre la base de los auténticos derechos humanos, apuesta por proteger la familia y exige que respete la soberanía de los Estados frente a imposiciones ideológicas por parte de organismos como las Naciones Unidas.
En México, el día de ayer cientos de asociaciones y miles de, principalmente jóvenes, participaron en la Marcha por la Vida. La marcha concluyó en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Las demandas fueron: La derogación del aborto en la Ciudad de México, y el resto de las entidades federativas que lo están haciendo; Políticas públicas para las mujeres embarazadas en situación vulnerable, eliminando con ello la discriminación hacia la mujer; y Garantizar la objeción de conciencia para el personal de salud.
