El caricaturista oaxaqueño, colaborador del periódico EL IMPARCIAL, el Mejor Diario de Oaxaca, Darío Castillejos, recibió ayer el homenaje y premio “La Catrina” en el Encuentro Internacional de Caricatura e Historieta (EICH) de la Feria Internacional del Libro (FIL) en Guadalajara.
El cartonista oaxaqueño admitió que la crítica se convirtió en la materia prima de su trabajo y este homenaje lo mantiene firme con sus ideales de libertad
Ante un auditorio Juan Rulfo pletórico y bajo una atmósfera inmejorable al contar con un nutrido público con marionetas de conejos, el colaborador de EL IMPARCIAL durante muchos años, admitió que cumple con una labor crítica.
“Nuestra profesión es muy digna. Alzar la voz contra la opresión es muy digno. Ser inconforme ante la injusticia y afilar la pluma contra la corrupción es un ideal muy digno. Soñar con vivir la ilusión de niños es muy digno. Permanecer firme y luchar contra el temor es digno. Mantener la apuesta por la crítica es necesario hoy y merece nuestro esfuerzo constante en aras del ideal más digno: la libertad”, apuntó el galardonado caricaturista.
La distinción, otorgada por la FIL y el CUAAD, destaca su creatividad y crítica social, que no solo preserva la identidad cultural de Oaxaca y México, sino que trasciende fronteras.
Con voz puntual, como su pincel, compartió que para él su oficio desde siempre ha sido una apuesta que ha decidido mantener desde niño, dado que su padre no compartía el gusto por esta profesión, al criarse en una familia de abogados, sin embargo, el siguió sus sueños como hasta ahora y está dispuesto a mantener ese pulso rebelde ante las injusticias.
Darío aprovechó también para reconocer a las personas que lo han impulsado en este notable oficio, como es el caso de los maestros Rogelio Naranjo y Rius,
TRIBUTO PARA ARTISTAS NOTABLES
El Homenaje de Caricatura “La Catrina”, establecido en 2002, se inspira en la figura icónica de La Catrina, creada por José Guadalupe Posada, y rinde tributo a artistas que, como Castillejos, han dejado una huella profunda en la reflexión social, la crítica política y el humor a través de su arte.
Este premio lo han recibido maestros “a los que admiro profundamente tales como Aragonés, Quino, Rius, Gabriel Vargas, Roberto Fontanarrosa, Helioflores, Naranjo, Nani, Liniers, El Fisgón, Magú, Boligan , Helguera, Trino, entre otros. Agradezco siempre a Dios que me ha permitido hacer lo que amo durante toda una vida, a las autoridades de la Fil, a mi familia, amigos y a todos los que gustan del humor y la gráfica”, escribió el monero oaxaqueño en sus redes sociales al conocer la decisión.
En su discurso, el artista admitió que este homenaje a “ha venido como un torrente de emoción a mi vida, anhelado sí, pero inesperado”.
En diversas entrevistas concedidas a EL IMPACIAL el monero indicó que iba a convertirse en abogado, pero la caricatura llegó a su vida. Y aunque esta lo ha vinculado al periodismo, Darío Castillejos Lázcares (Oaxaca, 1974) se piensa más como un artista que un periodista. Sin embargo, los constantes premios cosechados en 28 años de trayectoria lo muestran como un referente en la crítica al poder. Caricaturista, ilustrador y artista gráfico, Castillejos está entre los 100 mexicanos más creativos de la revista Forbes.
“Es siempre un placer que mi trabajo se reconozca, pues el trabajo es nuestra carta de presentación. Y que sea reconocido en México o fuera es una gran satisfacción porque es una señal de que estamos haciendo lo correcto”, indicó.
Darío, quien comenzó su andar como caricaturista en 1992, cuenta que esta expresión la conoció en su juventud, mediante las revistas con la obra de Helioflores, Ríus y Naranjo. Aunque reconoce que su formación como abogado fue esencial para despertar el sentido crítico que imprime a cada cartón.
Temas como Ayotzinapa, el autoritarismo, la injusticia, la conciencia ambiental, la violencia en contra de las mujeres o el legado de figuras como Francisco Toledo y de sus propios maestros de la caricatura son parte del sinfín de obras creadas en casi tres décadas. Algunas de ellas plasmadas en su libro Impresiones de un mundo desdibujado.