Los tradicionales juegos mecánicos que llegan a estas festividades operan sin regulación.
Solamente en la Ciudad de México existe su regulación y en el caso de Oaxaca, funcionan sin vigilancia de la autoridad.
Luis Ignacio Zárate Carballido, responsable de vinculación social de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPCO) explicó que quien da el permiso para la instalación de las ferias es la autoridad municipal y es la obligada a realizar la supervisión.
“Deben de saber desde el quién instalan un juego, que los dueños presenten un dictamen de la estructura del juego donde se garantice su buena condición, así como las instalaciones eléctricas. Desafortunadamente, como pertenecen a alguna organización, el dirigente da indicaciones de cómo se deben instalar”, señaló.
A penas el 17 de octubre, un estudiante cayó del juego mecánico conocido como el Trabant, en la feria de Tlacolula de Matamoros.
El joven salió proyectado de su asiento por el desprendimiento del seguro que lo sujetaba y se reportó con lesiones.
Asimismo, se han dado otros incidentes debido a la mala situación física de las estructuras, las cuales – en alguna ocasiones- se notan muy desgastadas por el tiempo.
En septiembre pasado, en la Feria de Chapultepec, el descarrilamiento de la Montaña Rusa, dejó a dos personas muertas y otras más lesionadas.
Debido a eso, la autoridad suspendió la Feria hasta conocer el peritaje para determinar responsabilidades.
En otros estados, también se difunden accidentes provocados por estos objetos.
Sin embargo, también puede provocar otras situaciones complicadas como cortos circuitos e incendios.
La mayoría de los establecimientos dejan sus cables sobre los pasillos, “siempre el tendido es sin la mínima precaución y en general, las conexiones las hacen sin aislar, pero la falta de supervisión provoca que sigan de esa manera”, comentó Zárate Carballido.
“La supervisión debe ser de manera constante en los días que estén trabajando en una festividad, además de la vigilancia de las direcciones involucradas de una autoridad municipal”, agregó.
El funcionario de la CEPCO expresó que lo más adecuado es que cada una de las empresas que trabajan en las ferias tuvieran dictámenes de la estructura del juego, las condiciones mecánicas, eléctricas y de gas.
“Se les hace ver a las familias del riesgo de estos aparatos, cada vez que son más peligrosos. Deberían subir a la gente con protección con los elementos necesarios para amortiguar en caso de una caída de varios metros de altura”, dijo.
El tiempo de vida de los juegos mecánicos es de acuerdo del uso que les dan, pero también al estar expuestos a las inclemencias del tiempo, pueden irse afectando.
Otro punto de preocupación en estas conglomeraciones es el uso inadecuado que las vendedoras de comida dan al combustible que usan, ya que el descuido de esas conexiones puede provocar incendios o lesiones.
