Son las 10:35 de la mañana y el propietario de una camioneta blanca con placas del estado de Oaxaca sigue sin aparecer. Hacía más de 15 minutos que los oficiales de vialidad esperaban al conductor para entregarle su infracción por estacionarse en un lugar prohibido. Un letrero vertical y el señalamiento en el arroyo vehicular indican que en la séptima calle de Armenta y López está prohibido el estacionarse.
Incluso durante la entrevista con el director de Vialidad, Fidel Vásquez Vargas, varios automovilistas tratan de estacionar sus unidades, pero se arrepienten al verlo. Una conductora opta por encender las luces como si avisara que solo va a descender otra de las ocupantes, pero esta última baja para comprar en la tienda. La espera es de casi 5 minutos y desde la unidad cada tanto observan si el oficial se acerca para llamarles la atención.
Ignoran conductores las señalizaciones
El estacionamiento en esta cuadra del centro de la ciudad de Oaxaca está prohibido debido a que se ubica la Cruz Roja Mexicana y es necesario que las ambulancias tengan acceso fácil para las emergencias; también por la cercanía de una sede de la fiscalía. Pero ni el letrero vertical ni las señalizaciones en el pavimento parecen ser respetados por las y los conductores, quienes diariamente ocupan el carril izquierdo para estacionarse.
Así lo ha hecho el conductor que a las 10:44 horas llega para darse cuenta que la grúa está subiendo su camioneta. El funcionario le explica del operativo “Cero tolerancia” contra vehículos estacionados en lugar prohibido, y que también va para aquellos que con sus unidades obstruyen el paso peatonal, las rampas para personas con discapacidad o se estacionan en dobles filas, entre otras faltas.
¡No lo vi (el letrero), yo me metí ahí (al laboratorio)! Dígame, ¿qué puedo hacer? Lo que sea”, le dice el hombre que agobiado sostiene un sobre con lo que parecen ser resultados de un estudio clínico.
Vásquez Vargas le pide acudir a la dirección de Movilidad y presentar la documentación que avale la propiedad de la unidad y su licencia vigente. Incluso, le comenta que pudo haber pagado poco más de 20 pesos por dejar su vehículo en el estacionamiento cercano y no la infracción y arrastre que ahora le saldrán en 900 pesos o poco más de mil pesos, respectivamente (aunque si paga pronto, la multa puede reducirse a la mitad). No así si la falta es “grave”, es decir, si se obstruyó una rampa o cajón para personas con discapacidad.
Tarifas determinadas por la SCT
El vehículo ya no se irá al encierro Primavera, habilitado para este tipo de hechos, si los documentos solicitados están en regla. Sin embargo, el conductor no se salvará de pagar el servicio de la grúa. Esta debe aplicar la tarifa marcada por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), refiere Vásquez Vargas, quien aclara que el monto no lo determina el ayuntamiento, aunque trata de vigilar que no sea excesivo.
Ante las quejas de motociclistas, quienes señalan que las grúas se llevan varias unidades y cobran el arrastre por cada una en lugar de dividirlo entre todas, Vásquez explica que esto se debe a que el arrastre implica un seguro de daños a terceros. Aunque refiere que como dirección el máximo de motocicletas que se sube a una grúa es de cinco o seis.
Multas, de 10 a 30 UMAS
De acuerdo con la Ley de Ingresos 2022, vigente en tanto el congreso siga sin aprobar la de 2023, el estacionarse en lugares prohibidos es motivo de multas de 10 a 30 veces la Unidad de Medida de Actualización, UMA (la que en este año es de 103.74 pesos y está vigente desde el 1 de febrero) para vehículos como autos o camionetas. Es decir, de los 1.37.4 pesos hasta los 3,112.2 pesos.
Si la falta se comete frente a rampas de acceso para personas con discapacidad, las multas serán de 45 a 80 veces la UMA.
Para las motocicletas, las multas por estacionarse en lugar prohibido son de 5 a 9 veces la UMA. Si con la acción se afecta a las rampas para personas con discapacidad, será de 25 a 35 UMA.
Cada mes, la dirección de Movilidad de Oaxaca de Juárez levanta un promedio de 2 mil multas a quienes se estacionan en lugares prohibidos, en dobles filas o porque obstruyen rampas para personas con discapacidad. Entre las vialidades donde se observa esta conducta están la calle Díaz Ordaz (centro), así como el bulevar Manuel Ruiz (colonia Reforma), la calzada Madero (a la altura del jardín Morelos), entre otras.
Piden a usuarios a cumplir con el reglamento de vialidad
No se trata de recaudar sino de aplicar la normatividad, defiende el director de Movilidad, quien explica que si todas las personas cumplieran con el reglamento de vialidad no habría ingresos por las faltas. Asimismo, refiere que el arrastre está a cargo de cinco empresas (una por día), que han presentado su documentación en regla al ayuntamiento, por lo que no existe exclusividad.
Para evitar los “pretextos” de los ciudadanos, Vásquez dice que se trabaja en el repintado de los señalamientos.
Ante las infracciones, hay conductores que tratan de sobornar a las y los agentes, quienes incluso han quedado exhibidos en videos. Sobre esta conducta, el presidente municipal, Francisco Martínez Neri, señaló recientemente que se investigan los casos y se aplican las sanciones correspondientes a los oficiales.