Para el maestro en Administración Educativa, Gabriel Ángeles Hernández, la reforma del presidente Andrés Manuel López Obrador en materia educativa, es propositiva pero arrastra la posible intervención sindical en asignación de plazas y una incógnita en la partida presupuestal para la aplicación.
Como catedrático de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO), en el Instituto de Ciencias de la Educación, muestra confianza ante las leyes reglamentarias en educación.
No obstante, el tema de la asignación de plazas viene a opacar el ánimo porque aduce que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) podría intervenir para las entregas.
“¿Quién garantiza que no será por medio de la lógica sindical la entrega de plazas? Se tiene que establecer un sistema abierto y transparente, y se tendría que publicar las necesidades de plazas, regiones y ubicaciones para lanzar las convocatorias”, señaló.
Ya que el sector que se forma en institutos ajenos a las normales como el caso del ICE, tiene toda la preparación para concursar por un espacio y estar frente a grupo.
Pues no sería benéfica la mecánica de entrega de espacios únicamente a los normalistas, tampoco que los ascensos se den por cuestiones sindicales sin un diagnóstico del desempeño de los profesores.
Para Ángeles Hernández, es necesaria la difusión de las leyes y la publicación de las mismas en el Diario Oficial de la Federación a fin de conocer sus alcances.
Para el maestro, la calidad se puede lograr con la suma de varios elementos, como la intervención de padres, madres de familia, infraestructura, entre otros.
Por eso, consideró procedente que los mismos docentes y padres de familia, junto con autoridades, definan los mecanismos para la medición del nivel de la enseñanza en las aulas.
De los puntos benéficos de la reforma de la 4T, consideró que garantiza la educación desde el nivel preescolar, primaria, medio superior y superior.
Dentro de su análisis de la ley educativa, aparte de lo propositiva e interesante que se muestra, deberían explicar el techo financiero que soportará las leyes. “En el papel se muestra interesante, propositiva, pero se desconoce si alcanzará el recurso; entre ellos el echar a andar la Escuela Mexicana”.
Finalmente, aplaudió que en esta reforma se observe al docente como agente de cambio.
