Tras cerrar las oficinas centrales del Registro Civil, trabajadores sindicalizados lograron prorrogar el regreso presencial a su centro de trabajo hasta después de las Fiestas de Todos Santos.
Y es que la semana pasada, los delegados sindicales llamaron a sus agremiados a decretar un paro de brazos caídos y toma de las instalaciones ubicadas en la calle de Rayón y Santos Degollado como medida de protesta.
Por lo cual suspendieron el servicio al público, en tanto negociaban con los directivos las condiciones para el regreso general a sus centros de trabajo, luego de permanecer a lo largo de más de dos años con trabajo a distancia.
Entre las quejas de los empleados agremiados al Sindicato de Burócratas destaca la falta de espacios para poder efectuar sus labores sin riesgo de contagio de Covid-19, así como carencia de mobiliario y equipo.
Sin embargo, luego de entablar una mesa de trabajo con la parte patronal, alcanzaron algunos acuerdos para un retorno seguro a las oficinas centrales del Registro Civil, y en mejores condiciones.
Entre los que figuran: realizar algunas adecuaciones de mobiliario para optimizar el trabajo, además dotar de equipo al personal que se presente a laborar y redoblar las medidas sanitarias.
En tanto se cumple la fecha para el regreso general contemplado para el 3 de noviembre, los trabajadores sindicalizados acuden solo por bloqueos reducidos al menos dos veces por semana en promedio, es decir cuatro días a la quincena.
Dicha situación ha generado algunas molestias dentro de los trabajadores de confianza, toda vez que son a ellos a quienes se les ha cargo el trabajo, pese a que carecen de certeza laboral.
Incluso prevén recortes a partir del mes de diciembre tras el cambio de administración y la llegada de los nuevos directivos, con lo cual se espera el término de contratos de personal de confianza.
