Con un porcentaje superior a la media nacional del 50%, Oaxaca se encuentra entre los primeros lugares de los estados del país con mayor rezago de vivienda con más del 77%, al igual que Chiapas y Guerrero, con 78.2 y 72%, respectivamente.
Esta situación se agudiza en el 14% de las familias oaxaqueñas que se encuentran en viviendas con hacinamiento, con mayor vulnerabilidad a enfermedades contagiosas como las respiratorias y gastrointestinales, entre otras.
Los resultados del último “Diagnóstico del derecho a la vivienda digna y decorosa” por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, señaló a Oaxaca con el 14.1% de viviendas con hacinamiento, solo por debajo de Guerrero (23.1%), Chiapas (15.9%) y Quintana Roo. En contraste, los de menor porcentaje fueron Zacatecas (3.5%), Nuevo León (3.6%) y Coahuila (4%).
Hacinamiento podría generar problemas de salud
Ante enfermedades contagiosas como la tuberculosis pulmonar, la Covid-19, influenza, entre otras que se transmiten por gotitas de saliva, las familias en esta situación no cuentan con espacios para aislar a los enfermos porque apenas cuentan con uno o dos cuartos.
Se suma que en Oaxaca, de acuerdo con el último Censo de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 33.1% de la totalidad de viviendas no cuenta la disponibilidad del agua entubada, con mayor incidencia en comunidades rurales.
Del mismo modo, 13.3% de las viviendas en Oaxaca tienen pisos de tierra, 74.9% de cemento y 11.5% de madera, mosaico u otro recubrimiento. Hasta 2020, Oaxaca se ubicó en el segundo lugar de los estados del país con mayor porcentaje de pisos de tierra, solo por debajo de Guerrero con el 14%.
De acuerdo al INEGI, se consideran cuartos aquellos espacios como las salas, cocinas, dormitorios u otro espacio donde las personas duerman de manera regular y que estén delimitados por paredes y puertas.
