Cuidados postoperatorios en pacientes de cáncer de mama son vitales
El cáncer de mama es curable siempre y cuando se detecte en etapas tempranas.
La cirujana oncóloga Araceli Bibiana Pacheco Calderón, destacó la importancia de los cuidados postoperatorios luego de una cirugía por cáncer de mama, a fin de evitar complicaciones.
En el marco del mes de la sensibilización sobre este padecimiento que aqueja sobre todo a las mujeres a partir de los 40 años, la cirujana oncóloga explicó que el cáncer de mama es el tumor maligno más frecuente en las mujeres en todo el mundo y la primera causa de muerte por cáncer.
Pacheco Calderón explicó que después de una operación, el médico especialista debe orientar y concienciar a la paciente para que se realice cuanto antes los cuidados postoperatorios correspondientes.
Destacó que los cuidados postquirúrgicos consisten en antibioticoterapia, analgésicos, vendaje torácico y cuidados del drenaje que se coloca después de toda cirugía mamaria. Posteriormente, la paciente entra en una etapa de rehabilitación basada en ejercicios especiales que evitan el linfedema (inflamación del brazo) y limitación de la movilidad del miembro torácico.
La especialista resaltó que los avances en los tratamientos y el incremento de la supervivencia de las pacientes con cáncer de mama demandan que los métodos de rehabilitación sean cada vez más efectivos, para lograr una mejor calidad de vida.
De la inflamación del brazo o conocida como linfedema, expuso que del 13 al 27% de las pacientes con disección axilar presentarán este padecimiento, cuyo riesgo se incrementa según sean la extensión de la disección axilar y la radioterapia.
Por otra parte, el sobrepeso y la obesidad aumentan la posibilidad de padecerlo hasta en 80% de los casos y además limitan los resultados del tratamiento. “En la actualidad, la rehabilitación indicada es poco conocida y por ello su incidencia es mayor de la que existiría si se realizara una adecuada prevención”.
Resaltó que entre los cuidados preventivos en el brazo, el pecho y la espalda del lado de la cirugía para disminuir el riesgo de linfedema, se encuentra evitar esfuerzos (cargar máximo 5 kilogramos), evitar heridas, quemaduras y picaduras de insectos.
“No dormir sobre el brazo afectado, no utilizar pulseras ni reloj; mantener el peso ideal y no aplicar termoterapia, crioterapia, ni contrastes en el cuadrante ni extremidad afectada. No extraer sangre del brazo afectado ni toma de signos vitales”.
Así también, se debe evitar tratamientos de acupuntura en el cuadrante y en el miembro afectado, además de la importancia de utilizar manga de compresión al viajar y hacer ejercicio.
“El cáncer de mama es curable siempre y cuando se detecte en etapas tempranas. Es necesario que las paciente se realicen la autoexploración mamaria, se realicen estudios de imagen como la mastografía partir de los 40 años y acudan al especialista por lo menos una vez al año. Lo anterior, es vital dado que se considera una triada de detección oportuna de cáncer de mama”, puntualizó Pacheco Calderón.
