Para la presidenta del Grupo de Estudios sobre la Mujer “Rosario Castellanos”, Angélica Ayala Ortiz, la falta de reconocimiento de la gravedad de la violencia feminicida en Oaxaca, es uno de los principales obstáculos para atender esta problemática.
Expuso que los datos que poseen autoridades de impartición de justicia, donde aseguran un descenso en los feminicidios en la entidad de más del 50% en 2019, contrastan con una realidad en la que día a días niñas y mujeres son asesinadas de manera violenta.
“El inicio del 2020 es un ejemplo contundente, al cerrar el mes con 19 casos de acuerdo al registro hemerográfico del Gesmujer; enero ha sido el mes más violento desde la administración del gobernador del Estado, Alejandro Murat, y el más violento al registrarse un 95% de estos asesinatos con armas de fuego”, destacó la activista y feminista.
Agregó que las niñas y las mujeres que han sido asesinadas de manera violenta merecen justicia, porque el estado no fue capaz de salvaguardad su integridad y su vida.
A esto se suma que las autoridades “se nieguen a reconocer el entorno feminicida en el que han ocurrido todos y cada uno de estos asesinatos violentos”, y lo cual genera una profunda indignación, “porque significa que a la falta de sensibilidad y capacidad para investigar desde una perspectiva de género, se suma la carencia de voluntad política”.
“Mientras la impunidad se mantenga, la violencia feminicida se sigue agravando y extendiendo más allá de los 40 municipios declarados con alerta por violencia de género”, insistió.
Además, dijo, las 402 niñas y mujeres asesinadas durante la actual administración son una muestra contundente de que los derechos de las oaxaqueñas están en riesgo y las declaraciones oficiales no son suficientes. “Justicia y alto a la impunidad eso es lo que merecen todas y cada una de ellas”, puntualizó.
