A raíz de los hechos ocurridos el 19 de junio del 2016 en el municipio de Asunción Nochixtlán, fue creado el “Comité de Víctimas por Justicia y Verdad 19 de junio”, el cual busca que se castigue a los responsables materiales e intelectuales de las víctimas que dejó a su paso, el intento de desalojo ocurrido en dicha comunidad a profesores de la Sección 22 y personas civiles.
En este sentido, refirieron que hasta el momento tanto el gobierno federal antecesor como el actual, han hecho caso omiso a la exigencia de justicia para que se castigue a los actores, dejando entre ver que se está basando en una política de perdón hacia el gobierno anterior tanto federal como estatal ante las diversas violaciones a los derechos humanos.
“A quienes integramos el comité, nos queda claro que no es la intención del actual gobierno federal investigar a los autores materiales e intelectuales que ordenaron y ejecutaron el operativo del 19 de junio del 2016 y con ellos se está beneficiando a Enrique Peña Nieto y a quienes ordenaron la ejecución de los hechos”, señalaron.
En este sentido, puntualizaron que no aceptarán ningún tipo de reparación del daño, ni disculpas públicas, ni mucho menos algún trato que pretenda aquietar la lucha de justicia que reclaman desde hace ya tres años.
“Expresamos de manera categórica que no aceptaremos ni avalaremos ningún pacto que pretenda dejar en la impunidad los hechos de Nochixtlán, pues nuestra exigencia central es el castigo a los culpables y su enjuiciamiento por la responsabilidad directa o indirecta que pudiera resultarles, incluyendo a toda la cadena de mando desde Enrique Peña Nieto hasta el gobernador del estado en ese entonces”, puntualizaron.
Asimismo, señalaron que cualquier asunto relacionado con los hechos de Nochixtlán, deberá ser consensuado con el propio comité de víctimas, ya que de ninguna manera aceptarán imposiciones y acuerdos cupulares que pretendan acallar el movimiento.
Por último, los miembros del Comité de Víctimas por Justicia y Verdad 19 de junio, realizaron un llamado de solidaridad a las bases del magisterio del país, así como de organizaciones sociales que los han acompañado durante estos tres años para continuar con la exigencia de justicia por la vía de las movilizaciones y la organización consiente de manera conjunta con el movimiento social.
