Las manos a la cabeza es una muestra de una final cardiaca. Los golpes sobre la mesa o los gritos y aplausos hacen de este domingo uno distinto. A la cotidianidad del Zócalo de la ciudad de Oaxaca se suma la euforia por un partido de futbol.
El segundo tiempo del último partido en Qatar 2022 ha reunido a cerca de 150 personas frente a dos pantallas en el portal de Las Flores. El conjunto de inmuebles, en uno de los cuales se alojó entre 1812 y 1813 el general José María Morelos y Pavón, es dos siglos después el lugar donde una afición multinacional se ha congregado. No se trata ahora de los “Sentimientos de la nación” mexicana, aunque sí de una afición que hizo del sentimiento argentino el suyo.
El partido transcurre en un domingo donde las notas de la marimba o de la Banda de Música del Estado es la música de fondo o el motivo de la convivencia familiar, pero que ahora no está o ha llegado tarde, minutos después del evento que acapara la atención de aficionados y transeúntes.
Lo que permanece es la venta ambulante, aquella que caracteriza a un estado como Oaxaca, con uno de los porcentajes más altos de informalidad.
Desde quien ofrece textiles y bolsos hasta quien oferta globos, juguetes para lanzar burbujas o retratos, todos quieren ganar en la contienda. A veces como mero entretenimiento y muchas más por sobrevivencia económica.
“¿Cuánto van?” “Quedó en 2-2” Un padre baja a su hijo de los hombros y se lo da a su esposa para acercarse a ver el partido. El tiempo reglamentario termina, pero aún queda la esperanza del extra y los aplausos y gritos vuelven. En las pantallas el nombre que más se escucha es de Messi.
Hace dos semanas y hasta hace unos días, la atención estaba enfocada en el portal del Palacio de Gobierno, que por 12 años se mantuvo ocupado por grupos de desplazados triquis de Copala y desde el 2 de diciembre luce vació, aunque cercado por vallas metálicas.
Aunque el partido tiene ahora la mayor atención, un grupo de música con notas andinas también logra congregar a un público de casi 20 personas, pero en el costado del portal de Mercaderes.
Entre las jardineras del Zócalo la venta de frituras está al alcance de menores pese a las modificaciones a la ley. También la venta de refrescos en botellas de plástico que terminan tiradas entre las flores de noche buenas.
Se acerca el mediodía y no todos se interesan en el futbol o deben estar más centrados en su realidad, como los aseadores de calzado a quienes nos les queda más que aprovechar la multitud para ganar 25 pesos por lustrar un par de zapatos.
Los turistas y transeúntes no pueden evitar detenerse para mirar cómo más de un centenar se ha reunido para apoyar principalmente a la selección argentina.
En las fotografías y videos que toman como recuerdo de su visita a la capital oaxaqueña hay quienes han capturado los momentos más emotivos de la final cardiaca y los motivos navideños de un espacio que ha quedado despejado tras el retiro de organizaciones sociales o el desalojo de triquis. Aunque de los últimos volvió un nuevo plantón este sábado.
Pasan los tiempos extras y del 2 a 2 ambas selecciones pasan a un marcador de 3 goles a 3. Es una final reñida que llega a los penales y que cerca del mediodía se define. 36 años después de su último triunfo, la selección liderada por Messi le gana a la francesa de Mbappé.
La emoción es compartida por los más de 100 aficionados congregados frente al par de pantallas, pero también por un infante que grita “¡Goool!” mientras descansa en una jardinera del Zócalo, el lugar de trabajo donde este domingo -y los demás días- se dedica a la venta de bolsas de manera ambulante.