Luego de dos años, el Sindicato Independiente 3 de Marzo renovó su mesa directiva. El ente es el más grande de los seis que representa a las y los empleados al servicio del ayuntamiento de Oaxaca de Juárez y cuyas labores se concentran en los servicios municipales.
Este sábado, el municipio dio a conocer de esta renovación, en la que hasta hace unos días estuvo como secretario general Bernabé Baltazar Díaz. Ahora, la mesa directiva está integrada por Enrique Sánchez López (secretario general), Julián García Cruz (secretario de organización), Víctor García Chincoya (secretario de trabajo y conflicto), Florinda Peralta Arista (secretaria de finanzas), José Luis Laurita Sánchez (secretario de relaciones) y Miguel Cruz Cruz (secretario de acción social y cultura).
A través de un comunicado, el ayuntamiento señaló que con esta representación se refrendó el compromiso de la administración para “continuar trabajando de manera conjunta con el sindicato” a beneficio de la población. Además de reconocerla labor de la mesa directiva saliente.
El Sindicato Independiente 3 de Marzo es uno de los seis que representa a las y los empleados municipales. El ente está por cumplir 50 años (el próximo 3 de marzo) y reúne a 1,080 empleados de base. De ellos 80 están en labores administrativas y mil se desempeñan en diversas áreas de servicios municipales como bacheo, recolección de desechos, alumbrado público, mantenimiento de parques y jardines, barrido, panteones y otros.
En los últimos años, ante diversas violaciones que en la pasada administración hubo a su contrato colectivo de trabajo, el sindicato ha realizado varias protestas con las cuales se suspendieron servicios como el de aseo público.
En 2022, a raíz de la crisis por la falta de un relleno sanitario (tras el cierre del que operó en Zaachila), el sindicato también se ha manifestado para exigir al ayuntamiento soluciones a la problemática. Entre ellas, una protesta en el zócalo, andador turístico y Plaza de la Danza, en las que incluso arrojaron desechos.
Recientemente, una de sus protestas fue para exigir “piso parejo” para sus empleados administrativos, quienes a diferencia de los de otros sindicatos sí volvieron a laborar tras las restricciones de la pandemia.
