En el Día Internacional de la Madre Tierra, conmemorado este 22 de abril, sociedad civil y artistas plásticos recordaron la efeméride con un programa en el Cerro del Fortín, ciudad de Oaxaca. Entre la flora nativa y los oasis construidos por la asociación civil Colmillo Blanco, se efectuó una ceremonia de agradecimiento a la Tierra y una exposición pictórica. Además de inaugurar un nuevo cuerpo de agua para la fauna silvestre de la zona.
Carlos Alberto Morales, presidente de Colmillo Blanco, señaló que la jornada de celebración fue una manera en que ciudadanos, artistas y la asociación civil concluyeron una etapa más de plantación de árboles nativos en el considerado pulmón de la ciudad y, desde 2004, decretado como parque estatal.
“Nosotros realizamos actividades ecológicas en el Cerro del Fortín y es un esfuerzo no solo de este día sino de muchos años, el plantar árboles, construir los oasis para que los animalitos que aún se conservan aquí tengan un lugar donde tomar agua”, explicó.
Durante el Día Internacional de la Madre Tierra, Morales dijo que no solo se trató de celebrar, también de hacer un llamado a las autoridades para atender las necesidades de las áreas naturales en lugares como la capital.
En el caso del Fortín, indicó que se requiere la actualización de un plan de manejo, además de frenar el avance de la mancha urbana, pues es esta la principal amenaza del cerro. “Desgraciadamente, ha habido invasiones, falta de actividades ecológicas, de planificación, no hay un plan de manejo al que se dé seguimiento”, criticó Morales.
Junto al Crestón, Cruz Blanca y otras zonas naturales aledañas, el Fortín forma parte de la Zona de Reserva Ecológica y Área Natural Protegida, decretada en noviembre de 1992.
Morales adelantó que a partir de esta efeméride se pretende acudir con el ayuntamiento capitalino y el congreso local para que el 22 de abril se oficialice como una conmemoración. Y que en tal se realicen actividades a favor de la preservación de las áreas verdes de la ciudad. Sin embargo, espera que durante todo el año el trabajo sea constante.
Y es que a decir de Morales, pese a ser un cerro muy deteriorado, en el Fortín aún se observan ejemplares de zorros, cacomixtles y tlacuaches, además de aves como gavilanes, quebrantahuesos y palomas. Entre la flora, hay árboles endémicos como huaje y copal. Sin embargo, dijo que ante el avance de la mancha urbana, la fauna silvestre necesita de alimento, por lo que se ha procurado sembrar árboles frutales y locales.
Carlos Morales llamó a las autoridades locales y de medio ambiente del estado para que pongan límites al avance de la mancha urbana. “Debe haber un control desde el municipio, desde el plan de desarrollo municipal. Debe haber un límite para cuidar y defender nuestras áreas naturales de forma definitiva, que ya no se permita el crecimiento urbano no solo en este cerro sino en todos los de la ciudad”, apuntó.
