egún informaron las autoridades locales este viernes a la agencia de noticias EFE, alrededor de la mitad de las 20.000 personas que viven en un radio de menos de seis kilómetros del volcán han decidido dejar sus casas, siguiendo las indicaciones de seguridad marcadas por las autoridades.
Algunos residentes muestran preocupación por abandonar sus hogares, ya que temen posibles robos de sus pertenencias personales y ganado. Sin embargo, las autoridades han enfatizado la importancia de priorizar la seguridad y la vida de las personas en esta situación de alto riesgo.
La agencia sismológica de Filipinas (Phivolcs), en su actualización diaria, ha alertado sobre la continua caída de rocas volcánicas y el aumento de la actividad sísmica en el volcán Mayón, así como la emisión de dióxido de sulfuro. Aunque Phivolcs elevó la alerta de 2 a 3 en una escala de 5, aún no se han ordenado evacuaciones obligatorias en las áreas cercanas al volcán. No obstante, Phivolcs recomienda encarecidamente a la población que siga las recomendaciones de evacuación debido al alto riesgo de erupción volcánica.
Durante la noche anterior, se observó el descenso de pequeños arroyos de lava por el emblemático volcán Mayón, conocido por su forma cónica casi perfecta y una de las atracciones principales de la provincia de Albay en la isla de Luzón. La ciudad de Legazpi, que alberga a aproximadamente 200.000 residentes, se encuentra a solo 11,2 kilómetros del volcán, lo que aumenta la preocupación por la seguridad de la población.
Además del volcán Mayón, en el oeste de la isla de Luzón, el volcán Taal continúa emitiendo gases tóxicos, lo que ha provocado un incremento en el número de personas que sufren problemas respiratorios en las aldeas cercanas. La actividad sísmica en ambas zonas volcánicas se ha mantenido durante las últimas 24 horas, según Phivolcs, lo que mantiene en alerta a las autoridades debido a la cercanía de estas zonas volcánicas con la ciudad de Manila, que se encuentra a aproximadamente 80 kilómetros.
Con el objetivo de garantizar la seguridad en el espacio aéreo, las autoridades aeroportuarias filipinas han prohibido que los aviones sobrevuelen las inmediaciones del volcán Mayón y el volcán Taal en un radio de menos de 3.048 kilómetros.
Las últimas erupciones del volcán Taal en 2020 y del volcán Mayón en 2018 obligaron a la evacuación de decenas