Este es un pequeño resumen del libro “Bilulu lo quiere comprar todo”, de la psicóloga infantil Carmen Romero de 49 años, nacida en Barcelona, quien a través de este cuento, parte del personaje “Bilulu” para guiar a los padres en la difícil tarea que tienen a la hora de establecer límites a sus hijos.
Esos momentos de rabietas, son causantes de que los padres se sientan frustrados, con angustia, impotencia de no saber cómo reaccionar con los pequeños, para no ser el centro de atención de otras personas, quienes parecen opinar que no tienen un control sobre sus hijos o simplemente no los saben educar.
Por eso, a través de puntos clave, te mostramos cómo puedes actuar ante una situación de rabieta según la psicóloga Carmen Romero:
- Las rabietas son procesos normales en todos los niños, que forman parte de su desarrollo emocional y que como padres se debe aprender a gestionar para mantener una relación armónica entre padre e hijo.
- Suelen comenzar cerca de los dos años, a veces puede ocurrir antes o después, algunas etapas pueden ser más tranquilas que otras dependiendo de la adaptación que tenga el niño con el nuevo mundo que se le presenta, esto puede disminuir y controlar de mejor manera alrededor de los seis años.
- Lo importante para hacer frente a una rabieta es, saber qué errores se deben evitar al momento que ocurra, en primer lugar, ser pacientes y no presentar nerviosismo, ni alteración. No tener prisa para que el niño deje de llorar, no se puede evitar que el niño llore. No abandonar el liderazgo, no ceder al llanto del niño, porque puede confundirse y puede llegar a tener más rabieta.
- No dejar que la familia de alrededor, opine sobre la educación de los hijos, como padres se debe tener presente que se pueden hacer muchas cosas para que los niños tengan una estabilidad emocional, el mayor deber es ayudarlos a manejar sus rabietas, puesto que ese comportamiento se aprende o adquiere en el momento en que los pequeños se relacionan con el entorno.
- En caso de que el menor, comience con las pataletas, se deben prevenir, aunque no siempre sea posible, es importante mantener el liderazgo, sin presentar autoridad.
- Se les debe hablar en un tono adecuado para lograr una calma y transmitir respeto hacia ellos, sin importar que estén gritando y pataleando, se debe mantener ese tono en todo momento.
