Walt Disney obtuvo la aprobación de los reguladores estadounidenses para comprar la mayoría de los activos de Twenty-First Century Fox por 71,300 millones de dólares, bajo la condición de que venda las 22 cadenas deportivas regionales que posee la segunda empresa, indicó este miércoles el Departamento de Justicia.
Los activos de Fox han sido objeto de una guerra de ofertas entre Disney y Comcast, pues ambos buscan expandir sus negocios de entretenimiento con los éxitos televisivos y las franquicias cinematográficas de Fox, para competir con rivales digitales como Netflix y Amazon.
La adquisición no incluye a las emisoras de alcance nacional Fox News, Fox Business o Fox Sports.
Disney, que posee su propia red deportiva con ESPN, ha aceptado desprenderse de todas las cadenas deportivas regionales de Fox en Estados Unidos que proveen programación a mercados regionales y locales, como YES Network, que transmite partidos de los New York Yankees al área metropolitana de Nueva York.
En conjunto, las cadenas deportivas regionales de Fox tienen unos 61 millones de abonados y transmiten en vivo los partidos de 44 de los 91 equipos profesionales de Estados Unidos en tres de las cuatro principales ligas deportivas.
El Departamento de Justicia dijo que sin las desinversiones, “la propuesta adquisición eliminaría la sustancial competencia que existe actualmente entre Disney y Fox y probablemente resultaría en precios más caros para la programación deportiva de cable”.
El anuncio implica un traspié para Comcast, que todavía tiene que responder a la última oferta de Disney por Fox, revelada la semana pasada. Comcast, cuya oferta tiene un valor de 65,000 millones de dólares, declinó hacer comentarios.
El acuerdo entre Fox y Disney aún necesita muchas otras aprobaciones de entidades regulatorias de otros países.
De concretarse la transacción, el escenario mediático del entretenimiento se vería reacomodado de una forma profunda, ya que el imperio de Mickey Mouse obtendría los derechos de cientos de películas y programas de televisión, algunos de ellas icónicos para la cultura pop, como “Los Simpsons”, por ejemplo.
Del cine, van incluidos los derechos que tiene Fox de superhéroes de Marvel Cómics, como los X-Men y los Fantastic Four, los cuales Disney no ha podido mostrar en su Universo Cinematrográfico de Marvel.
