Más de 18 meses después de su cierre por la pandemia de Covid-19 y a poco más de dos del intento fallido, el Museo de los Pintores Oaxaqueños (Mupo) reabrió al público este 4 de octubre. Una exposición con obras de “maestros oaxaqueños” se sumó a la oferta que desde julio alberga el recinto, en el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca.
El acceso al histórico inmueble que ocupa, se dio a unos días del aniversario 17 del museo, aunque de manera parcial y como una prueba para perfeccionar sus aforos límites, según explica Efraín Morales Sánchez, director del recinto. “Va a estar abierto de lunes a viernes, de 10 a 15 horas”, agrega, al tiempo de aclarar que aunque la reapertura coincidió con el paso a semáforo verde (riesgo bajo de contagio), ya se había planeado para este lunes.
Hasta nuevo aviso, se decidió que el acceso no tendrá costo alguno, pero tampoco se permitirá el ingreso de infantes. Además de que se contempla un máximo de 15 visitantes simultáneamente, todos ellos ceñidos al uso obligatorio de cubrebocas al entrar y durante su estancia. La sana distancia, desinfección de calzado al entrar, entre otras, son las medidas de esta reapertura.
Para entrar al museo, y contrario a la decisión de hacer citas, el acceso será conforme la gente acuda al museo. Se espera que después de esta semana se definan los aforos máximos y el tiempo máximo de recorrido, agrega Morales.
Entre las exposiciones que presenta actualmente el museo están la colectiva de Pago en especie y la individual del artista Rame Cuen, Yu Ku; asimismo, Enigma de ballenas, de Cristina Luna; Orar, de Franz Klainsek, y Ascender, de Adán Paredes.
A ellas se agregó recientemente una con obras de artistas oaxaqueños de larga trayectoria. Con excepción de Maximino Javier, los demás ya fallecieron, pero su legado se mantiene en el estado: Rufino Tamayo, Rodolfo Nieto, Rodolfo Morales, Juan Alcázar y Alejandro Santiago.
Consciente de que reabrir se da aún en medio de los riesgos por la pandemia, Morales señala que el museo es un referente cultural en Oaxaca y tiene “mucha atracción” e interés por parte de los turistas, artistas y todo tipo de visitantes. Independientemente de ello, considera que la reapertura del museo es una especie de “oxigenación” y de esparcimiento en la ciudad, y la manera en que la gente puede conocer la obra de autores de trayectorias diversas.
