Los pueblos prehispánicos plasmaban su historia y conocimientos en códices. Esos libros contenían símbolos, dibujos y signos propios de una escritura. Una conocida como glífica. Chávez Hollar retoma ese sistema para dejar sus figuras y símbolos; pero ya no en códices, sino en placas de metal desgastadas por el tiempo. Así es como da paso a una nueva glífica, una nueva escritura.
En lo que fuera una fábrica de cal y ahora un espacio cultural es donde Chávez Hollar comparte las “huellas” de su arte. Uno que era habitual ver en los muros y que aún están en calles de barrios como Jalatlaco o las colonias Cascada y Reforma.
Desde el pasado viernes y durante un mes, Chávez Hollar expone Nueva Glífica, una serie de placas metálicas en las que grabó dibujos y símbolos de la naturaleza. La exposición se encuentra en La Calera (Juan Escutia 101, barrio del Exmarquesado). La muestra abarca también las plantillas o “matrices” que sirvieron para “imprimir” en los trozos de lo que fuera un tanque de agua. Asimismo, representa una nueva etapa en su trayectoria, en la que se apropia del verbo hollar para designar las huellas de sus pasos, dejando de lado el seudónimo de Cawamo.
Varias piezas de la exposición corresponden a 2017 y están hechas en los restos de un contenedor. Otras más son de 2016, pero que no se habían mostrado por carecer de un lugar apropiado. Y es que como señala el autor “la obra busca su espacio”.
Nueva Glífica retoma no sólo el sistema de escritura con dibujos y símbolos propios de las culturas maya, azteca y otras del México antiguo, también el imaginario del que se ha nutrido la obra de Chávez Hollar.
Es decir, todas las manifestaciones de la creación artística en el México antiguo, desde la escultura hasta los códices o los textiles.
“A través de la fragmentación de las imágenes contenidas y de la deconstrucción de las mismas, recuperamos unas construcciones más grandes que parecen estar codificadas, que a lo que nos remiten es al pasado, a los códices”, explica el autor.
También que el hablar de matrices y no plantillas es para explicar que las figuras pueden reproducirse como la gráfica y abarcar otros soportes.
“Me gusta decir matriz porque tienen el aspecto de lo gráfico, porque en la gráfica haces una placa que es una matriz y a partir de esas estampas. Para mí, esto es igual, sólo que con esto puedes intervenir un papel o lo puedes expandir a un muro, dependiendo de los requerimientos de la pieza o idea”.
Nueva Glífica es la propuesta más reciente de Chávez Hollar, un artista que ha trabajado varios materiales y técnicas. Eso lo ha llevado a expresarse por medio de la gráfica, el arte urbano, la cerámica o la escultura en vidrio. Además de no encasillarse en una expresión, sino hacer del arte posibilidades infinitas y dejar sus huellas ahora en el textil, objeto de su próxima experimentación.
