Jalapa Del Marqués, el  enigmático templo hundido
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Arte y Cultura

Jalapa Del Marqués, el  enigmático templo hundido

Con todos sus servicios turísticos, leyendas, tradiciones, Jalapa del Marqués emerge en Oaxaca


Jalapa Del Marqués, el   enigmático templo hundido | El Imparcial de Oaxaca
El templo fue construido en el siglo XVI por los frailes dominicos.

Para llegar a Jalapa del Marqués hay que tomar la carretera al Istmo de Tehuantepec, saliendo de la capital del Estado de Oaxaca, la distancia es de 220 kilómetros y en automóvil el viaje dura aproximadamente tres horas y 15 minutos, aproximadamente. 

Jalapa del Marqués ofrece diversos servicios turísticos para los visitantes, el pueblo está sobre la carretera internacional, ahí se puede comer bien en sus diversos restaurantes que son sumamente famosos por las mojarras. Quien va a algún lugar del Istmo de Tehuantepec hace una escala en este lugar porque sabe que va a deleitar a su paladar con una mojarra preparada de diferentes formas.

Pero lo más atractivo y el motivo por el cual muchos turistas acuden hasta este lugar, es por el templo hundido, también conocido como el templo fantasma de Jalapa del Marqués, el cual es un símbolo de la conexión entre el pasado y el presente en el rico tapiz histórico oaxaqueño, esta se encuentra en la presa “Benito Juárez” de esta localidad. Durante la época de sequías, este impactante templo emerge para darle un sello único y especial al paisaje. 

La gente quisiera que siempre haya agua suficiente, pero los turistas no, porque ellos quieren apreciar el templo que fue construido por los frailes dominicos en el siglo XVI. 

Se tienen antecedentes de que el pueblo se fundó alrededor del año 1480 para venerar a Xhunashi, la Virgen María, pero para que los zapotecas sintieran admiración se abreviaba solo como Xhunashi, que significa adorar a la virgen. 

Parte del pueblo de Jalapa del Marqués fue inundado intencionalmente hace más de 63 años, exactamente el primero de enero de 1961, tras la construcción de una presa, la cual iba a ser alimentada por los ríos Tehuantepec y Tequisistlán, actualmente el templo solo se ve cuando desciende mucho el nivel del agua, en la temporada de estiaje. 

Con respecto a la población y las costumbres de Jalapa del Marqués, la población total en el año 2020 era de 11 mil 735 habitantes, misma que depende tanto de la pesca, como de la agricultura y ganadería. Los habitantes tejen atarrayas y trasmanos que se venden en el mercado municipal y fabrican comales de barro para la gastronomía local que comprende mojarras en todos sus tipos, así como chacales y otros moluscos. 

Las creencias y las religiones desempeñan un papel fundamental en la vida de sus habitantes, por la fusión de las tradiciones indígenas y la influencia de la colonización española, misma que se ve presente en algunos de los nativos del lugar que tuvieron parientes de otras nacionalidades. 

Antes de llamarse Jalapa del Marqués, el pueblo era identificado como Yuuchi, pero actualmente es famoso Jalapa del Marqués, por sus mojarras, pero internacionalmente por su bello templo hundido, que ha desatado cualquier cantidad de mitos y leyendas. 

 

Ángel Ortiz Ruíz, un joven emprendedor en la gastronomía

Para el joven Ángel Ortiz Ruíz, Oaxaca ha sido adoptada como su segunda tierra, ya que él nació en Ecatepec en el Estado de México, el 13 de junio de 1997, se siente feliz por la educación y formación que sus padres le dieron, por ello es que su visión es diferente a la de los demás jóvenes. 

Ángel nos comenta que su interés por la industria hotelera surgió desde que era niño, por eso se incorporó a diversos trabajos siempre atento y observando los procesos de los servicios otorgados a los huéspedes y a los comensales.

El comenta que su mayor competencia es el mismo y su miedo es caer en la monotonía y convertirse en otro restaurante más, de ahí la importancia de innovar como un hábito de su empresa para poder siempre estar a la vanguardia.

Su motivación para salir adelante es su familia, sus padres sobre todo, y creer en su proyecto, reafirmando que hizo lo correcto al emprender al tomar todas las decisiones y sentirse seguro de sí mismo. 

Sus metas son consolidar y posicionar su restaurante, para abrir nuevas sucursales en lugares hermosos de nuestra bella entidad oaxaqueña como Puerto Escondido, después Mazunte, y así continuar, por lo cual valora todo el apoyo que le brinda el personal que ejecuta las ideas que surgen y que deciden en juntas de trabajo. 

Su sueño personal es consolidar una familia, seguir creciendo de manera profesional y exigirse más, para poder llevar el nombre de Boyal, que es su empresa, a otros países, para poner muy en alto el nombre de México. 

La capacitación es algo fundamental que Ángel define como de vital importancia, para poder dar la atención a los clientes más exigentes, con la seguridad y confianza que se hará con gran compromiso y profesionalismo. 

Su restaurante se encuentra en Huayápam y cuenta con una vista panorámica en donde se aprecian las montañas, en un espacio diseñado para pasar un momento de tranquilidad, ideal para desestresarse y deleitarse con los platillos acompañados de las mejores bebidas.

Ángel Ortiz Ruíz destaca por sus innovaciones en el mundo de la gastronomía en Oaxaca.