Ninguna autoridad federal ha vuelto a poner un pie en la zona federal que ocupa la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) como tiradero clandestino de basura, sobre el playón del río Atoyac.
A más de una semana de la clausura del relleno sanitario de la ciudad ubicado en Zaachila, la autoridad aún no tiene una solución sobre la nueva sede del basurero.
Mientras que ciudadanos han arrojado sus bolsas de residuos en las calles de la capital, pese que hay multas o arresto, sin embargo, eso poco les importa a los capitalinos.
Este martes, habitantes de la colonia Artículo 123 se plantaron en el playón del Atoyac para exigir la clausura del tiradero de CATEM.
Demandaron a las autoridades ambientales y municipales clausurar dicho sitio, dado que genera una impresionante contaminación ambiental, toda vez que los lixiviados se van directo al río.
Cerca de ahí, alumnos y maestros de la Escuela Primaria Urbana Federal “Profesor Vicente González Díaz”, ubicada sobre Prolongación de Nuño del Mercado, protestaron para exigir a los comerciantes no tirar más sus desechos.
Griselda Hernández, maestra del plantel educativo, informó que en los últimos días, los comerciantes de la zona han lanzado su basura en los accesos de la escuela.
Es que a los vendedores se les hace fácil lanzar sus desperdicios en la banqueta de la escuela, situación que los alumnos, así como docentes ya no van a permitir.
Los estudiantes de quinto y sexto grado salieron a los contornos de la escuela exhibiendo pancartas para pedir a los comerciantes un alto al tiradero de basura y hacer conciencia del daño que provocan.
Asimismo, repartieron folletos en donde exhortan a no tirar la basura en la vía pública.
Los alumnos y alumnas también pidieron alto a dicha problemática que se está volviendo un foco de infección en la zona.
