Vilma Martínez Cortés es una agraciada joven que sin comprar boleto se sacó la lotería de la política. Por esos juegos de la fortuna llegó a ser diputada del PRD de manera fortuita y hoy es presidenta municipal de Tehuantepec, pero ¿qué creen? Cayó en las redes de dos lagartones de la política que están a punto de apagar su buena estrella al manipularla grotescamente.
El senador Salomón Jara y Antonino Morales Toledo edil de San Blas Atempa y capo de la mayoría de los presidentes municipales de la franja istmeña, la tienen sometida, casi en calidad de rehén. Los tehuanos saben bien que ella no gobierna, el que decide en el municipio es Antonino.
CAOS TOTAL
Ayer la metieron en un brete al ordenarle liderear a un grupo de autoridades agrarias de media docena de comunidades del Istmo sin pleno conocimiento del problema. El plan de los dos lagartones fue movilizar a los dirigentes agrarios para desestabilizar la zona con la idea de que los llamen a negociar. A Salomón y a Antonino, no a los campesinos ni a Vilma.
Esto provocó que desquiciaran totalmente el tránsito en la carretera Internacional. Caos total al bloquear más de cinco puntos.
Los comisariados ejidales y de bienes comunales de Lieza, Morro Mazatán, Tagolaba, Rincón Moreno, entre otros, reclaman el pago de siniestros de cultivo de sorgo a razón de 1,500 pesos por hectárea.
El Secretario General de Gobierno, el istmeño Paco Piza, atendió a la ingenua presidenta municipal de Tehuantepec quien, sin conocimiento de la realidad del problema y sin vela en el entierro, le dijo que había unas 600 hectáreas de sorgo que se perdieron. Que pagándole a cada campesino sus pérdidas, se resolvía el conflicto. Y como todo es dinero, calcularon poco más de siete millones de pesos.
RAPIÑOSOS
Ese fue el acuerdo y hasta la noche del lunes todos estaban de acuerdo y la amenaza de bloqueo se diluyó. Pero aparecieron los que manejan a Vilma y dijeron no. Que el gobierno tenía que pagar por ¡dos mil hectáreas! Una barbaridad de dinero si consideramos el precio de 1,500 por hectárea siniestrada. Así quedaron al descubierto dos maniobras: Que Salomón y Antonino están detrás del conflicto, que su objetivo es obtener dinero, no ayudar a los productores de sorgo.
La pobre Vilma, totalmente neófita en estas politiquerías que tanto critica el presidente AMLO y que tan bien practica el senador Salomón Jara, tuvo que sacar las manos al no poder cumplir con su compromiso de evitar el cierre de carretera.
INGENUA
Bien dicen que la política no es para iniciados, menos para ingenuos.
Por eso digo que la buena estrella de Vilma se está apagando ante la ambición desmedida de quienes la manejan. En este momento, como presidenta municipal de Tehuantepec es solamente la figura y algo más peligroso, es la que firma, pero los que deciden el destino del presupuesto son Salomón y Antonino. Quién sabe qué cuentas entregue al final de su administración.
Digo que la edil de Tehuantepec es una dama incauta porque sin comprar boleto le fue bien en política y creyó que así sería siempre.
Se dejó embaucar y ella aparece directamente como incitadora de los bloqueos de los comisariados. Dicen que aceptó este riesgo porque sus dos titiriteros prometen apoyarla para postularse como candidata a la reelección y permitir que su pareja Raciel Cabrera siga cobrando como su asesor.
Por lo pronto, Vilma está entre la espada y la pared. Los campesinos ya la desconocieron como interlocutora y sus manipuladores Salmón y Antonino, le dicen que desconozca los acuerdos que hizo porque del dinero que obtengan del gobierno le darán para su próxima campaña electoral.
ESTRELLA APAGADA
El bloqueo de la carretera por tantos sorgueros puede significar el ocaso de la increíble suerte política de Vilma. Su carrera es un suceso político muy singular. Mueve a la risa y a la tragedia, Resulta que esta dama era intendente en las oficinas del casi desaparecido PRD. No es por menospreciar su status, pero lo criticable es que el entonces cacique de ese partido, Rosendo Serrano, quiso jugar con ella y resultó burlado. La impuso como “juanita” y como cuota juvenil para que, luego de ganar la diputación local en el 2013 dejará la curul a Karina Barón entonces dueña de la UGOCP. El caso es que la “juanita” no dejó la curul. Ahora se odian.
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