El presidente municipal de Villa Hidalgo, Jaime Cruz Villalpando, su hijo Sebastián, su esposa Brenda Marisol Montañez Saucedo y dos funcionarios del ayuntamiento fueron secuestrados el pasado 5 de febrero en Aguascalientes por un grupo criminal del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Según las autoridades ministeriales. Aunque el edil y su hijo fueron liberados, la esposa del presidente, Brenda Marisol Montañez, sigue en cautiverio.
LOS PRIMEROS MOMENTOS DEL SECUESTRO
De acuerdo con los informes oficiales, la jornada de secuestros comenzó cuando el hijo del presidente municipal, Sebastián Cruz. Quien también es cantante, se dirigió a Tepatitlán, Jalisco, para tratar de resolver una serie de amenazas emitidas en mantas colocadas en Aguascalientes por el grupo criminal liderado por “El Charro”. Identificado como uno de los lugartenientes del CJNG. La situación empeoró cuando Sebastián Cruz fue capturado y mantenido en cautiverio.
Horas después, Jaime Cruz Villalpando, recibió una llamada en la que le informaron que su hijo había sido secuestrado por este grupo criminal. En una llamada de más de 13 minutos con “El Charro”, el alcalde intentó negociar con el delincuente. Insistiendo en que él y su familia eran personas de trabajo, sin nexos con el crimen organizado. Durante la negociación, se acordó un encuentro en Aguascalientes, a menos de 15 minutos de su municipio, Villa Hidalgo.
EXIGENCIAS DEL CRIMEN ORGANIZADO
El 5 de febrero, Jaime Cruz y dos funcionarios del ayuntamiento fueron citados en una cafetería de Aguascalientes. Donde fueron secuestrados y llevados a una casa de seguridad en Tepatitlán, Jalisco. Según las investigaciones, el líder criminal que se identificó como jefe de plaza le explicó al presidente municipal que el secuestro de su hijo y su captura no tenían relación con la presentación del cantante en un palenque. Como inicialmente se pensó. El secuestro, según el criminal, era una represalia por una supuesta vinculación de Cruz Villalpando con un grupo delictivo rival.
El cártel exigió la destitución inmediata del director de Seguridad Pública Municipal de Villa Hidalgo y que, en su lugar, fuera nombrado un nuevo titular propuesto por ellos. Durante los días siguientes, el alcalde recibió múltiples llamadas donde se le presionó para que cumpliera con la solicitud. Sin obtener una respuesta positiva.
SECUESTRO DE LA ESPOSA DEL ALCALDE
El viernes 7 de febrero, la situación se intensificó cuando los criminales informaron a Jaime Cruz que su esposa, Brenda Marisol Montañez Saucedo, presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Villa Hidalgo, también había sido secuestrada. La mujer fue privada de su libertad por un grupo armado al salir de un coto residencial en Aguascalientes. Lo que incrementó la tensión en la familia y en la comunidad.
La exigencia de los criminales sigue siendo la destitución del secretario de Seguridad Pública Municipal, como parte de un plan para imponer a un funcionario afín al Cártel Jalisco Nueva Generación. Lo que ha puesto en evidencia las tensas relaciones entre las autoridades locales y las organizaciones criminales que operan en la región.
REPERCUSIONES Y SEGUIMIENTO
Las autoridades locales, junto con la Fiscalía General del Estado de Aguascalientes, están llevando a cabo investigaciones para dar con los responsables de este secuestro y detener a los implicados. Mientras tanto, la familia del presidente municipal y la comunidad de Villa Hidalgo continúan a la espera de noticias sobre la situación de Brenda Marisol Montañez. La cual sigue siendo una de las principales preocupaciones en el caso.
La noticia del secuestro de un funcionario público de alto nivel y su familia ha generado gran alarma en la región. Lo que subraya una vez más la violencia e influencia que los grupos del crimen organizado tienen en distintas áreas del país. Particularmente en el occidente de México.
El presidente municipal de Villa Hidalgo, por su parte, se mantiene firme en no ceder a las presiones de los criminales. Mientras tanto, las autoridades siguen trabajando para esclarecer los hechos y garantizar la seguridad de los involucrados.