La cifra de víctimas mortales en la balacera registrada la noche de este jueves frente al restaurante El Che, ubicado en la colonia Reforma de la ciudad, aumentó a seis. Entre los fallecidos se encuentra un exmilitar, quien trabajaba como escolta del dirigente del CIT-FITO, Marco Antonio Sánchez, y que habría sido uno de los principales objetivos del ataque.
En las investigaciones de los agentes del delito de alto impacto lograron establecer que tres de las seis personas asesinadas eran escoltas de Marco Antonio Sánchez que impidieron la ejecución del líder transportista, mismos que ya fueron identificados legalmente, pero por seguridad la fiscalía está guardando sus generales ante el temor a represarías a la familia de las víctimas.
Y el resto era los agresores son de los delincuentes que pretendían darle muerte a Marco Sánchez.
El ataque armado, ocurrido alrededor de las 21:00 horas, dejó un saldo inicial de cinco muertos y un herido, pero durante las primeras investigaciones se confirmaron nuevas víctimas, lo que eleva la cifra total de muertes a seis. La persona lesionada, identificada como A. M. P., permanece internada en un hospital de la ciudad, donde recibe atención médica.
La Fiscalía de Oaxaca informó que en un operativo conjunto entre la Policía Estatal y la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), se aseguraron varios elementos clave que podrían ser determinantes para esclarecer el ataque.
Uno de los hallazgos más relevantes fue un vehículo Kia de color negro, que presentó evidentes daños causados por disparos de arma de fuego. En su interior fueron localizados casquillos de armas de alto calibre, como los utilizados por los llamados cuernos de chivo, así como manchas de sangre, lo que sugiere que el vehículo estuvo involucrado en un enfrentamiento armado.
Además, se encontraron más casquillos en el lugar del atentado, correspondientes a armas de calibres .062 y 9 milímetros, utilizados por los sicarios que atacaron al dirigente. En uno de los cuerpos que quedaron frente al restaurante El Che, se halló un arma de fuego, lo que sugiere que la víctima pudo haber intentado defenderse durante el ataque. La diligencia del levantamiento de los cuerpos sin vida concluyó a las 4 de la madrugada de este viernes.
Más tarde, las autoridades confirmaron la localización de otro vehículo presuntamente empleado por los sicarios, una camioneta que también presentaba agujeros de bala y casquillos en su interior.
El ataque fue ejecutado por un grupo armado que aparentemente pretendía asesinar a Marco Antonio Sánchez. Sin embargo, la reacción de sus escoltas y la presencia de vehículos blindados habrían impedido que el dirigente resultara herido.
En un comunicado oficial, la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) detalló que las investigaciones están a cargo de la Fiscalía Especializada para la Atención a Delitos de Alto Impacto. Desde el primer momento, se activaron los protocolos de investigación correspondientes para recabar los datos de prueba necesarios que permitan esclarecer las causas y los responsables del ataque.
De acuerdo con la Fiscalía, en el lugar se levantaron los cuerpos de las personas fallecidas, pero hasta el momento solo se logró identificar a una víctima, cuyas iniciales son A. S. J. D. Las autoridades siguen trabajando en la identificación de las demás personas fallecidas y en esclarecer los móviles del ataque.
Además, se confirmó que la persona herida, A. M. P., recibe atención médica en un hospital local.
Las investigaciones continúan y se espera que en los próximos días se proporcionen más detalles sobre los avances del caso y los responsables del ataque.
