Mazatlán, Sinaloa.
Un menor de edad originario de Monterrey, Nuevo León, murió al estrellarse el paracaídas en que paseaba contra un hotel y después su cuerpo cayó en la zona rocosa de la playa.
Efraín, de 12 años de edad, fue la víctima; el adolescente fue llevado aún con vida por paramédicos a una clínica privada, pero media hora después falleció a consecuencia de múltiples fracturas y golpes internos.
El accidente ocurrió poco antes de las 15:30 frente al Hotel El Cid, que es donde la familia se hospedaba.
Inicialmente se dijo que la cuerda se había roto, por lo que el paracaídas fue a dar directamente a la estructura del establecimiento. Pero hay la versión de que desde la lancha fue jalado al momento que golpeó con la pared, para luego caer de una altura de 25 pisos al vacío, después de lo cual cayó encima de una palapa y desde ahí se precipitó a las rocas.
Elementos salvavidas de esa zona le dieron ayuda y lo sacaron hasta la avenida Camarón Sábalo, para entregarlo a una ambulancia en la que fue llevado a la clínica La Marina para ser atendido.
Media hora después se dio a conocer que los esfuerzos de los médicos fueron inútiles debido a la gravedad de las lesiones y que había dejado de existir.
Mientras tanto la Policía, Capitanía de Puerto y elementos de la Secretaría de Marina iniciaron la búsqueda del dueño del parachute, pero no fue localizado.
En el mismo punto el año pasado el motor de la lancha que jalaba el paracaídas se apagó y una turista se fue a pique, pero quedó enredada en una palmera y no paso del susto.