Tragedia sobre tragedia
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Pegatinas Reivindicativas

Tragedia sobre tragedia

 


En nuestro país esta semana se sobrepasó la cifra de doscientas mil personas que han fallecido a causa de la Covid-19. 200,862 al momento de cerrar estas líneas, para ser precisa. Sí, una cifra de horror que no alcanza si quiera a describir el dolor padecido por las familias de cada una de las personas que han fenecido. Y apuntamos ese número sabiendo que una vez cotejados los datos por el INEGI, serán muchos más debido al subregistro de casos reconocido por las autoridades (https://bit.ly/3rn3r4F).

Ante la cifra, el vocero del gobierno federal para la pandemia se ha empeñado en señalar que no hay que concentrarnos en números redondos (https://bit.ly/3cr52ls). Nada nuevo bajo el sol. La administración federal tiene un largo historial de garrafales decisiones e insensibles declaraciones tras sus espaldas desde el inicio de la emergencia sanitaria (https://bit.ly/3w6mOSQ). Sin embargo, el haber llegado a tan lamentable cifra aunado a su galopante aumento diario y lo que parece haberse ya aceptado sin oposición como la tercera ola de COVID-19 en el país tras la semana santa que recién inicia, significa que la administración federal renovará la estrategia ante la evidencia indiscutible de que la actual estrategia ha fallado, ¿cierto?

Desde mediados del año pasado, cuando como humanidad se comenzaba a tener información sobre el comportamiento del virus SARS-CoV-2, expertos en salud, control de enfermedades, investigadores y exministros en la materia comenzaron a hacer propuestas para hacer frente a este singular oponente común. Todas y cada una de ellas han sido rechazadas (https://bit.ly/3w6nGqA; https://bit.ly/2QIOBZz).

Incluso el compendio de recomendaciones “Reflexiones sobre la respuesta de México ante la pandemia de COVID-19 y sugerencias para enfrentar los próximos retos”, realizado bajo los auspicios del Gobierno Federal y la Organización Mundial de la Salud, con la participación de instituciones académicas, de investigación y del sector salud (https://bit.ly/3rpqH1F; https://bit.ly/31nOPqZ), ha sido completamente omitido por el gobierno de México a pesar de su promesa de incorporar algunos de sus muy urgentes consejos (https://bit.ly/39BfFRd).

Todas las expectativas del gobierno federal están en la inoculación de la población. De acuerdo con Jesús Ramírez, vocero de la Presidencia, se tienen contratadas al menos 197.9 millones de vacunas contra Covid-19 en 2021 (https://bit.ly/3tSedRU). No obstante, tales dosis aún no se tienen físicamente y debido a la compleja logística necesaria, así como a la alta demanda internacional, no es previsible establecer un calendario de vacunación con alto índice de confianza (https://bit.ly/3dcv4bj; ).

Asimismo, es urgente reconocer que la vacunación en sí misma no es un elemento que desempeñe un papel determinante en el declive de los contagios sino hasta que se tiene un importante porcentaje de población vacunada. Voltéemos a ver el caso de Chile (https://bbc.in/3cqGFVa), líderes en inoculación y, sin embargo, aún con necesidad de cierres a la actividad económica y cuarentenas pues los índices de casos positivos y hospitalizaciones no ceden.

La cifra de fallecimientos que se ha alcanzado esta semana es un inneludible recordatorio de que la estrategia del gobierno federal frente la pandemia es un rotundo fracaso. Ante la evidencia contundente de que la vacunación de la población no es herramienta suficiente para detener los contagios -menos aún a la velocidad que el país avanza- es de extrema urgencia un golpe de timón. Suficiente tragedia son ya las irreparables pérdidas humanas generadas por la enfermedad. Otra tragedia sería tener un gobierno ciego y sordo.

 

@GalateaSwanson