Ayotzinapa a contraflujo

El “caso Ayotzinapa” ocupa siempre espacio en todos los restiradores que tienen papeles con apuntes de temas de Seguridad Nacional.

Y como este Tanque de Ideas” está para analizar hipótesis de SEGURIDAD en todos sus teatros no ocuparemos su tiempo (amigos lectores) con antecedentes. Vamos, sin orquillamientos,  al punto.

Desde la cabecera de la mesa Paul von Hindenburg blande su bastón de pragmatismo y dice 

-Insoslayable resulta el tema de la desaparición de 43 alumnos de la escuela rural en Ayotzinapa. Ello por ser un asunto que si alcanza la categoría de riesgo a la seguridad nacional de ese mágico país llamado México.

Razón más que suficiente, para abordar su discusión en nuestra mesa de debates-. Gestos de asentamiento poblaron la Riviera de la mesa. Paul continúa 

– Como primer argumento me permito proponer a ustedes que un tema a desglosar sea el señalamiento de …. “Fue el Estado”. 

Creo que no tiene mayor respaldo que la sistemática voz de una corriente ideológica radical, que no por repetirla, como táctica mediática, la convierte en realidad.

Lo cito -dice Hindenburg  -como entrada, porque conlleva el señalamiento directo de que el Ejército participó en los hechos que se comentan. Lo cual afecta no sólo el prestigio de la institución, pero también condiciona su actuación en beneficio de la sociedad por lo que se conoce como, pérdida de la confianza- .

– También es oportuno señalar -señala el germano -que la República Mexicana se encuentra desagregada, desde el punto de vista militar y para efectos de seguridad y defensa, en Regiones, Zonas y Sectores militares. Lo anterior significa que todo espacio, toda porción del territorio nacional, están bajo la responsabilidad de un Comandante en el Ejército.

Por lo tanto- sigue en modo académico -Ayotzinapa se ubica en el sector que está bajo responsabilidad del 27/o Batallón de Infantería. Pero igual debe considerarse- enfatiza Paul -que el lamentable evento tuvo efecto en la administración anterior. Es decir, cuando no existía certeza jurídica sobre la posibilidad de que las tropas participaran en actividades de seguridad pública. Razón por la que se concretaron a tomar conocimiento de los acontecimientos e informarlo a su escalón superior-. Acá, los rostros de los que tienen formación militar asintieron, aquellos que no dibujaron signos de interrogación en las caras-. Y Paul siguió

-No por sencillo el argumento, puede dejar de considerarse. Igual que, no por repetir una consigna política (fue el Estado)se convierte en realidad.

– Como tercer subtema -continúa -me permito proponer a ustedes (y aquellos que a posteriori lean esto), recapacitar sobre el término “verdad histórica”, tan vilipendiado por algunos medios informativos, pero sobre todo, por los abogados que representan a los padres de los estudiantes desaparecidos. Ello en virtud de que no existe, como se pretende, crear una frase lapidaria o de efectos fatales (sin cambio posible), mucho menos de carácter político.

 Se trata en cambio de un término jurídico, legal, que indica que los hechos consignados en dicha averiguación, son la verdad encontrada hasta el momento, según las evidencias presentes. Es decir, se trata de una verdad histórica, que cambiará la verdad jurídica, una vez se demuestre que son datos incontrovertibles.

Nadie se movía, parpadeaba y menos interrumpía  -Para comenzar un análisis serio y objetivo sobre los hechos acaecidos en Ayotzinapa- dice Paul von Hindenburg -será menester recapacitar y analizar sin carga ideológica, los conceptos aquí vertidos. Lo cual nos permitirá posteriormente, avanzar sobre otros conceptos tan relevantes como los que se acaban de poner a su disposición.  Tarea difícil? pregunta -Ya lo creo que sí! -se responde él solo-Pero vale la pena.  

Paul tomó la actitud de aquel que reparte cartas y espera el inicio de la partida.

Último patrullaje.- en lo que tiene que ver con el evento donde soldados mexicanos cayeron en el error de confundir el camino y llegar a territorio extranjero esto podemos adelantar. -Al evento, considerado en los acuerdos binacionales, se le denomina “paso inocente”.

Lo anterior significa que no existió aviesa ni torcida intención.

Pasa más veces de las que conocemos.

Existe un protocolo para resolverlo.

– se allanan a la autoridad local.

– entregan armamento.

– se informa a la autoridad de quien depende el que cruzó.

– se presenta dicha autoridad, reconoce a sus subordinados, y le son entregados, junto con el armamento.

Listo. Asunto resuelto.

Que ahora esas “benditas redes sociales” se conviertan en “borrachos parlanchines” ese es ya otro asunto.