Fue la primera conferencia “mañanera” del gobernador Salomón Jara Cruz. Los reporteros que ahí se encontraban, salieron de la calma a la sorpresa cuando el gobernador, Salomón Jara Cruz, anunció que se procedería contra su antecesor, Alejandro Murat Hinojosa, por la venta de plazas en la estructura gubernamental.
El cambio de administración había sido terso, pero en este mensaje se advertía que habría muy pronto choque de trenes, los cual no ha ocurrido hasta el momento; sólo rounds de sombra.
“Lo que sí me preocupa es que había un compromiso de que no habrían más plazas, trabajadores de base; lo que sí me preocupa es que no habría más concesiones de taxis; lo que sí me preocupa es que no se entregarían más fiats”, dijo textualmente.
Y agregó:
“Las bases de los trabajadores que se contrataron, son aproximadamente entre 1,500 a 1,700 nuevos. Los está revisando la Secretaría de Administración, viendo cómo atender ese tema. Yo no aceptaré que nos quieran ver la cara”, expresó el gobernador en esa ocasión.
Eso sí, comentó que en su gobierno no tendría trabajadores que hayan comprados sus plazas e indicó que en su momento denunciaría a los que vendieron las mismas.
Parece que el tema le había calado al titular del Ejecutivo, sobre todo, porque hay priístas de altos vuelos inmiscuidos en este caso, a los cuales desea exhibir sus corruptelas.
Por eso, el día de su toma de protesta, Jara Cruz dijo: “Pretenden heredarnos un incremento de plazas basificadas que representa un inaceptable incremento de gasto de gobierno cercano al 37%; esto, no lo vamos a aceptar. Quisieron pasarse de lanza, ya tenemos la información de que dos grandes dirigentes del PRI vendieron plazas en cien mil, 150 mil y hasta en 200 mil pesos; esto no lo vamos a permitir, no se pueden burlar de nuestro pueblo. Para aquellos que madrugan siempre hay un pueblo atento. No toleraremos más la corrupción; como alternativa, hemos diseñado una propuesta de reestructuración administrativa que nos va a permitir ahorrar más de cien millones de pesos al año”, expresó.
La verdad que nada es nuevo en la venta de plazas; todos los gobernadores las reparten antes de irse, sólo que algunos funcionarios las venden.
Lo importante aquí es que el gobernador Salomón Jara ha tomado el toro por los cuernos y ha dicho que procederá contra los que cometieron esta acción fraudulenta, que mete al nuevo gobierno en un conflicto de tipo económico, pues hay que utilizar mayor presupuesto para el pago de nómina.
Al iniciar el gobierno de Alejandro Murat se presentó una situación similar, por lo que fueron revocadas 600 bases que otorgó el gobierno del denostado Gabino Cué Monteagudo.
Pero en este gobierno, el de Murat, en agosto del año pasado, en acuerdo en lo oscurito, entre el gobierno y el sindicato de burócratas se otorgaron 300 plazas a familiares de los colaboradores de Murat, así como a familiares de los líderes sindicales. No sabemos si ellos también tendrán que devolver esas plazas, pues fueron entregadas de manera ventajosas.
Están a punto de cumplirse los primeros 100 días de gobierno de Salomón Jara y este debe revelar cuántas plazas se vendieron, a qué precio y quienes son los dos exsecretario de Administración inmiscuidos en estas acciones fraudulentas.
Tendrá también que señalarse las acciones a las que se han hecho acreedores, como inhabilitarlos en la función pública.
No hacerlo significaría que la lucha contra la corrupción impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en Oaxaca, es letra muerta.
Por supuesto que debe haber un escarmiento para evitar que los nuevos funcionarios de la 4T repitan la misma historia, pues el manejo de recursos es muy delicado y más cuando no hay transparencia en su aplicación.
Seguramente los oaxaqueños estarán atentos a este informe del gobernador Salomón Jara Cruz, sobre la escandalosa venta de plazas, pues ya es hora de arrancar la corrupción de raíz, no de palabra, sino con hechos.
AUMENTAN FEMINICIDIOS
Las muertes violentas de mujeres siguen en aumento y a la fecha no hay ningún pronunciamiento de la titular de la Secretaría de las Mujeres de Oaxaca (SMO), Elisa Zepeda, a pesar de que el estado se encuentra en primer lugar en feminicidios.
La funcionaria emplea el mismo discurso de realizar acciones en el combate de la violencia contra la mujer, pero en su propia secretaría ya se han dado inconformidades por su falta de liderazgo con perspectiva de género.
La titular de la SMO permitió el cambio de oficinas de la colonia Reforma al municipio de Santa Lucía del Camino, sin considerar los efectos negativos que esto generaría a quienes son madres de familia y tienen inscritos a sus hijos en escuelas cercanas a lo que era su centro de trabajo.
Le faltó a Elisa Zepeda acercamiento con el personal, al menos para avisarles con tiempo sobre el traslado a otro municipio, donde difícilmente llegarán las marchas feministas que en varias ocasiones han mostrado su rechazo a esta dependencia por su falta de capacidad y su doble discurso.
Con el tiempo nos daremos cuenta si la nueva secretaria de las mujeres realmente tiene ganas de trabajar y unir esfuerzos con las organizaciones sociales, sin importar que haya simpatía entre las mismas.
