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Escaparate Político

Óbices

 


Recibí varios comentarios respecto al siguiente tema, este fue publicado en mi página www.escaparatepolitico.com (03/junio/2022) por lo que consideré importante, reproducirlo ahora, para los lectores de EL IMPARCIAL, El mejor diario de Oaxaca. Esto por la vigencia del tema:

COMO siempre lo he dicho, puede ser el gobierno el principal obstáculo o bien el principal acicate para la inversión en las naciones (los países desarrollados suelen estimular, esto no bloquear).

QUIEN decide emprender un negocio en Oaxaca se da de topes ante tantos requisitos y trámites que piden nuestras autoridades para la apertura de un nuevo negocio que, tras la búsqueda de una utilidad, además traerá generación de empleos, pagos al Seguro Social, pago de ISR y todo el rosario de impuestos que esto representa.

LES COMENTO el caso de nuestro gobierno municipal. Desde la ventanilla única los trámites son una barrera para la apertura, además de caros, los permisos pasan por formatos, miles de documentos y en el tradicional –venga después–, –vamos a revisar su documentación–.

A QUÉ GRADO llega nuestra insana burocracia que cuando algún emprendedor de Oaxaca llega a otros estados del norte, se lleva una increíble sorpresa; NO requiere permisos para abrir un negocio convencional.

Un oaxaqueño llegó a la sede del Ayuntamiento de Mazatlán, pidió informes de los permisos requeridos para abrir un punto de venta. Le sorprende la respuesta del empleado que le atendió.

– ¿Permiso? ¿Permiso de qué o para qué? Disculpe, pero no entendí su pregunta- Le respondían. Él obviamente iba con la idea retrógrada de los gobiernos saqueadores de dinero que se inventan permisos e impuestos por todo, como el de inicio de operaciones que exige nuestro Ayuntamiento.

– ¿Quién se lo está pidiendo? – Preguntaba intrigado el funcionario. -No nadie- Respondía el oaxaqueño -Solo quiero saber qué permiso tengo que obtener porque voy a abrir un negocio en esta ciudad-.

-No señor, usted abra, aquí no se necesitan permisos, lo que queremos es que haya gente que cree empleos– Fue la respuesta obtenida.

INCREÍBLE que, en este mismo país, haya visiones, culturas, acciones tan distintas para incentivar el crecimiento económico, aquí se obstaculiza, allá todo lo contrario. Aquí un pequeño ejemplo de por qué hay tanto estancamiento económico en el sur a diferencia del norte mexicano.

EL PROBLEMA insisto yace en la clase política parasitaria que nos gobierna ¿Se imagina? Si en el ayuntamiento tenemos de (cuasi) presidente municipal, a un guerrillero como Felipe Canseco, que no hizo otra cosa más que vivir de la extorsión al gobierno y ahora hasta es parte de éste. Ni qué decir de su achichincle, perdón, de su jefe, un difuso Martínez Neri.

Los típicos seudo luchadores sociales especializados en pegar con la izquierda para cobrar con la derecha, solo saben hacer esto; cobrar. Mas no saben cómo generar riqueza, ese es el gran dilema entre los sectores productivos y los que no los son.

LOS CAMBIOS dinámicos que requieren las sociedades contemporáneas no se podrán dar mientras tengamos en las posiciones gubernamentales a esos políticos que gustan hacerla de óbices de la inversión.

 

CHAPUCERÍA

ES LA PALABRA por la que podemos definir el entorno en que nuestra clase gobernante, enmarcó el tan esperado evento oaxaqueño que es la GUELAGUETZA.

ME REFIERO al estado en que se encuentra la ciudad; calles destrozadas, vías sin terminar, semáforos inservibles, sin sistema de recolección de basura, enmarcada la ciudad con bloqueos por doquier, en pocas palabras, una chapucería.

¿Qué halla el turista que decide ir a Monte Albán? Cráteres, calles con coladeras destapadas, calles que ya no tienen pavimento y ya en carretera; muladares a los costados del camino, hedores insoportables, todo por la improvisación y falta de previsión. Si desde 2006, las extorsiones de las organizaciones para permitir la realización de la fiesta de los oaxaqueños, era una constante, era de esperarse que después de 2 años sin haberla realizado, al reiniciarla, las organizaciones se vendrían con todo y las autoridades lo sabían, pero dejaron estallar la avaricia de las agrupaciones “izquierdistas”.

No creo que eso es lo que esperaban ver los turistas que vinieron a Oaxaca animados por la gran difusión dada allende de nuestras fronteras, en el One Times Square, por ejemplo. Vaya forma de dañar la industria turística que podría ser la llave de mejora económica para esta entidad.

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