Inseguridad
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Opinión

El Crematorio

Inseguridad

 


Publica ayer el periódico reforma, una severa acusación de corrupción dentro del cuerpo policiaco agrupado en la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca, acusación que proviene de los propios elementos que integran la Seguridad Pública del Estado, quienes se quejan de abiertas corruptelas y la precaria situación por la que atraviesan: sin uniformes, ni protección alguna, sin equipo ni armamentos, pese que en el sexenio pasado se compró una  millonaria cantidad para armamentos y chalecos antibalas.

El aumento de la delincuencia en todo el Estado se debe en primer lugar que la policía no tiene el equipo necesario para el combate a la delincuencia, sin gasolina por eso no hay patrullaje en la ciudad y los vehículos en mal estado o desvielados y solamente ahora que vino López Obrador sacaron las mejores patrullas y las llenaron de gasolina, para aparentar un servicio eficiente. Vivimos en una verdadera crisis de seguridad  ante una creciente delincuencia con una sospechosa actitud de los altos mandos y los bajos sueldos de los guardianes del orden.

Hemos insistido que mientras no exista una carrera policial profesional, una escuela efectiva que capacite y eduque a sus elementos, Oaxaca no podrá contar con una policía a la altura de las exigencias actuales de la mínima seguridad.

Diariamente existe una creciente violencia, pues su estructura de seguridad, inteligencia y justicia se encuentran sobrepasadas y corrompidas, la sociedad no ha perdido la total confianza en la seguridad del estado y se encuentra en una total indefensión con un cuerpo mal pagado, mal entrenado, que se enfrenta ante una corrupción galopante, que se reditúa a simple vista ante una alarmante ola de violencia y delincuencia creciente. Urge profesionalizar y depurar a los cuerpos policiacos y acabar con la corrupción que hoy los corroe.