Deuda histórica
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Editorial

Deuda histórica

 


Tal parece que los anhelos por alcanzar un sistema de salud de excelencia en Oaxaca tendrán que esperar mucho tiempo para convertirse en realidad, pues la deuda de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) impuso en junio de 2023 nueva marca histórica al llegar a los 17 mil 7 millones de pesos, que cancela toda oportunidad de mejorar infraestructura, equipo y material. Más allá de las cifras que confirman que en el primer semestre de este año la deuda se ha disparado, se tiene reportada una plantilla de 17 mil 098 trabajadores, de los cuales seis mil 856 son personal de base, ocho mil 903 regularizados y formalizados, el resto de honorarios, así como planta estatal, creando un impresionante aparato burocrático.

Al inicio de su gestión, el gobernador Salomón Jara Cruz anunció que la Federación destinará en este 2023 una inversión superior a los cuatro mil millones de pesos para el mejoramiento del sector salud de la entidad. Confirmó el pésimo estado en que recibió los servicios de salud, y pagos por más de 2 mil 400 millones de pesos por adeudos al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE) desde el año 2008.

El impacto de esta deuda irresponsable afectará las finanzas y las participaciones del estado hasta el año 2036 y si bien se busca resarcir y mejorar las necesidades que el sector salud ha tenido y acumulado por años, se observa muy complicado que se puedan atender y resolver carencias y necesidades en todos los hospitales, clínicas y centros de salud.

Sin duda la salud es una de las principales demandas ciudadanas, además de ser un derecho constitucional, por lo que, tanto el gobierno federal como el estado tienen la responsabilidad de dar atención y servicios médicos a todas y todos los oaxaqueños de las ocho regiones. Y junto con ello, la entrega de medicamentos en todas las unidades médicas del estado, para dar la mayor cobertura posible a las necesidades sociales en este rubro y mejorar la calidad de vida de los sectores vulnerables.

 

Prevenir embarazos

 

El embarazo en las adolescentes afecta negativamente la salud, la permanencia en la escuela, los ingresos presentes y futuros, el acceso a oportunidades recreativas, sociales y laborales especializadas y de calidad, y el desarrollo humano. Además del embarazo, tener relaciones sexuales sin protección implica un riesgo permanente de adquirir una infección de transmisión sexual.

Es un fenómeno que ha cobrado importancia en los últimos años debido a que México ocupa el primer lugar en el tema, entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con una tasa de fecundidad de 77 nacimientos por cada mil adolescentes de 15 a 19 años de edad.

EN México, 23% de las y los adolescentes inician su vida sexual entre los 12 y los 19 años. De estos, 15% de los hombres y 33% de las mujeres no utilizaron ningún método anticonceptivo en su primera relación sexual. Es así que de acuerdo con estos datos, aproximadamente ocurren al año 340 mil nacimientos en mujeres menores de 19 años. En Oaxaca la mayor parte de los embarazos no deseados entre los adolescentes se registran por la falta de información sobre salud reproductiva y sexual, e insuficiente comunicación con los padres de familia. Por ello es necesario intensificar estrategias y programas de información, educación y comunicación que constituyen un instrumento fundamental para asegurar los derechos sexuales y reproductivos de los adolescentes.

Hoy es indispensable reconocer la importancia de trabajar en conjunto con el gobierno, la sociedad civil y todas las partes involucradas para que las mujeres y sus familias conozcan las opciones viables para planificar una familia en el momento que decidan, de acuerdo con su plan de vida y ejerzan libremente sus derechos sexuales y reproductivos. La participación de los padres y madres de familia en la instrucción de sus hijos en estos temas es prioritaria, ya que representan el primer contacto de información con sus hijos.